Después de caer con Antofagasta, y perder la opción de alcanzar el primer lugar, Darío Franco debía cumplir con varios desafíos para lograr dar vuelta la mala imagen que tiene entre los hinchas y las dudas de Azul Azul respecto de su continuidad. Con el triunfo en el Superclásico cumplió una de esas metas, pero sigue en la misma posición inestable, pese al emocionante 3-2 con el que superó a Colo Colo. Este miércoles tiene otra misión: ganar la final de la Copa Chile ante Universidad Católica.

Ayer, pese al triunfo, Franco no quiso hablar en conferencia de prensa. Quizás las pifias que recibió afectaron su ánimo pese al triunfo, el que para algunos hinchas estuvo en riesgo por los propios errores del técnico en el planteamiento inicial del duelo.

El DT de la "U" corrigió en el segundo tiempo y así logró ganar el partido, pero con el sorpresivo equipo titular con el que comenzó el compromiso repitió las fallas que le cuestionan los hinchas y los dirigentes.

Pero además de los resultados y el nivel de juego, el técnico argentino debe manejar la interna del camarín, en la que los jugadores se han distanciado, debido a que no entienden las decisiones del entrenador.

Un ejemplo se dio en el Superclásico y el once inicial, que dejó afuera a jugadores que podían encargarse de la conducción. "Estábamos jugando a puros pelotazos, no teníamos ni tampoco administrábamos la pelota. Sentíamos que jugábamos con muchos volantes de corte, resignando tener el balón. Por suerte, el 'profe' (Franco) se dio cuenta de lo que pasaba y vinieron los cambios", expresó un miembro del equipo tras el triunfo.

Otra señal clara de la división es que varios jugadores destacaron a Johnny Herrera y José Rojas, y no al DT, como los responsables de cambiar la actitud del equipo, con las palabras que lanzaron al resto en el entretiempo. Incluso, hay integrantes del plantel que creen que lo dicho por los dos referentes hicieron que Franco modificara el planteamiento en la segunda parte.

Sumar un título este miércoles ante la Católica no salva por sí solo a Franco, pero no ganarlo, sentencia aún más su futuro, considerando que para ganar el torneo nacional no tiene la primera opción.

En ese escenario, en dos fechas más, los azules enfrentan de nuevo la UC. Un desafío exigente ya que a diferencia de Colo Colo, los cruzados sí están en la pelea por el título. Será una nueva prueba para Franco en un encuentro que además puede definir el campeonato nacional.

Pero en Azul Azul esperan que junto con ganar los clásicos y sumar títulos, el DT logré un nivel de juego que vuelva a encantar a los hinchas y recupere la credibilidad de los jugadores.