Es otra noche de sábado y Marv, el gigante de gran mandíbula y corazón solitario, despierta tras largas horas de inconsciencia en una callejuela de Sin City, la ciudad del pecado. Su querida novia de burdel, la prostituta Goldie, ya murió hace varias noches y la vida sigue teniendo el sabor de siempre. Es decir, amargo. "¿Dónde diablos estoy?", se pregunta poco antes que una pandilla de muchachos intente infructuosamente desvalijarlo con armas de fuego. Como respuesta a su fracaso, recogen la persecución implacable de Marv. El líder se lleva la peor parte: Marv lo degüella en primer plano.
Aquella es una sinopsis ajustada de Otro sábado en la noche, el primer episodio de Sin City 2: Una dama fatal, la secuela de Sin city: La ciudad del pecado (2005), película que adaptó con gran éxito de público los volúmenes 1, 3 y 4 de la novela gráfica homónima de Frank Miller. Codirigida por Robert Rodríguez y el propio Miller, al igual que su antecesora, Sin City 2 llega mañana a las salas chilenas y lo que se verá esta vez en pantalla es una adaptación del volumen 2 y la inclusión de dos historias originales. Como siempre, los villanos son los políticos corruptos y uno que otro narcotraficante de poder absoluto. Los héroes, si es que se pueden llamar así, son matones con algo de sentimientos en la línea de Marv, detectives privados, ex policías, bailarinas de clubes nocturnos y prostitutas.
La principal novedad en términos dramáticos es el personaje de Ava Lord, una clásica femme fatale de novela negra, que en la cinta es interpretada por Eva Green. Ava tiene belleza y personalidad de sobra, capaz de distorsionar los comportamientos de su millonario esposo, Damien Lord, o de su perturbado amante, Dwight McCarthy (Josh Brolin, en Sin City 2, y Clive Owen, en Sin City 1).
Paralelamente al estreno de la película, se realiza la primera publicación a cargo de una editorial local de la novela gráfica de Frank Miller. El sello Unlimited y La Tercera lanzaron esta semana el primer tomo del volumen 1 de la serie. Se trata de Un duro adiós, que además servía de inspiración para gran parte de Sin City 1. La colección recoge tres series, distribuidas en nueve libros en total: el volumen 2 es Mataría por ella y el 3 corresponde a La gran masacre.
En la película de Miller y Rodríguez otra vez vuelven los personajes del fotógrafo y periodista McCarthy (pero en una época anterior a Sin City 1, lo que explicaría el cambio de actor, Brolin por Owen), el veterano policía Johnny Hartigan (Bruce Willis), del viejo episodio Ese bastardo amarillo, la dominátrix Gail (Rosario Dawson), la bailarina exótica Nancy Callahan (Jessic Alba) y por supuesto, Marv (Mickey Rourke).
En términos visuales, la película sigue siendo en blanco y negro y con trazos visuales estilizados, buscando la ideal mímesis con la serie gráfica de Miller.
LA REVOLUCIÓN MILLER
Contemporáneo de otros artistas gráficos de peso, como los británicos Alan Moore (Watchmen) y Neil Gaiman (The sandman), el estadounidense Frank Miller creó Sin City hace 23 años. Fue en 1991 cuando publicó por entregas el primer volumen El largo adiós, en la revista Dark Horse Presents. En esta parte, el personaje de Marv es el gran protagonista, a quien Miller definió en su momento como "un Conan con gabardina", inspirado en el clásico Mike Hammer del novelista pulp Mickey Spillane. Las historias hiperviolentas de Hammer casi siempre concluían igual: sus rufianes vomitaban tras la correspondiente patada que Hammer les daba en el estómago o los testículos.
Marv es un bruto injustamente acusado de un crimen que no cometió y tiene clara la línea que separa el bien y el mal. Es simple y directo, lejos del más complejo Dwight McCarthy, periodista y fotógrafo enloquecido con una vida tomando imágenes de crímenes y casos de famosos adulterios. Su camino lo termina de manchar Ava Lord, que responde a los clásicos moldes de la mujer fatal de la novela negra.
Precisamente, esta obra de Frank Miller tiene su mayor logro al reelaborar las clásicas coordenadas de la novela negra en la corriente del cómic, fundando el llamado neo noir. Dos de sus mayores distintivos son la utilización del blanco y negro (hasta ese momento bastante olvidado por el cómic) y la introducción de una narrativa ágil y dinámica.
Uno de los mejores personajes de la serie es Johnny Hartigan, protagonista del mencionado Ese bastardo amarillo (para muchos, el mejor episodio de la serie). Hartigan retorna en Sin City 2 como un fantasma y tiene las características del héroe que se redime a último minuto, constante ya explorada por Frank Miller en obras tan importantes como Daredevil, Elektra y, claro, El caballero oscuro. En esta serie, publicada por DC Comics en 1986, Frank Miller le cambiaba la cara y el ánimo a Batman, transformándolo en aquel héroe ya viejo y cansado, de vuelta de todo, que retorna al campo de batalla para librar la guerra final contra la corrupción. Pero ya no es un superhéroe. Es, lo que llaman, un vigilante. Un personaje más allá de los buenos y los malos .