Volaban las almohadas autografiadas por la Avenida Perú y el cantante Alex Kapranos y los otros tres miembros de Franz Ferdinand no la podían creer.

El grupo escocés aterrizó por primera vez en Chile en febrero de 2006 para presentarse junto a U2, en el Estadio Nacional, y para tocar al día siguiente en el cierre del Festival de Viña del Mar. Y a lo más esperaban a un grupo de "enterados" que podían asomarse a uno de sus conciertos, pero nunca,  ni en sus cálculos más entusiastas, que en esta parte del mundo los iban a esperar en el aeropuerto y en el hotel, ni que la prensa festivalera los compararía con The Police y Faith No More, por el buen momento en que llegaban a la Quinta Vergara.

"Fue muy intensa toda la experiencia y, por cierto, mucho más sorprendente de lo que nunca imaginamos", confirma Kapranos, al teléfono desde Escocia y a sólo un par de semanas de que su banda regrese al país (el 13 de marzo, en el Movistar Arena) y se ponga al día con una fanaticada que nunca los olvidó.   

Las pruebas de su paso por Chlie no sólo quedaron en la memoria de los integrantes: un documental realizado por Don Letts, músico y director británico que acompañó a Franz Ferdinand durante su primer paso por Sudamérica, muestra varios pasajes del conjunto en Viña del Mar y un artesanal video hecho el año pasado por alumnos del Liceo Miguel León Prado, parodiando el clip de Can't stop feeling -de su último disco, llamado Tonight: Franz Ferdinand (2009)-, también llegó a oídos de la banda como muestra de la fidelidad local: "Claro que vimos el video y nos pareció alucinante ver los mismos fondos que grabamos en Escocia, pero replicados en Chile en un video divertidísimo. Aprovecho de confirmar que ellos (los alumnos del liceo) serán nuestros invitados especiales en Santiago", dice Kapranos, riendo.

LOS MISMOS COLORES
Lo de Santiago no sólo tendrá que ver con saldar una deuda. Desde su último paso por el país, Franz Ferdinand no ha hecho más que crecer y su tercer y último trabajo confirma la vocación por un tono experimental que también ha motivado cambios en escena, con la inclusión de sintetizadores y más recursos visuales.

"Me gusta pensar que es como un árbol que mantiene sus raíces, pero que ha crecido, se ha expandido con el tiempo", cuenta el cantante.

"Los colores de la banda son los mismos, todo eso que vieron en 2006 todavía está ahí, el rocanrol, pero ahora es algo más grande, con más ideas y sonidos. Ahora tenemos sintetizadores, es verdad y más recursos escénicos. Pero no se preocupen que de todos modos cantaremos Take me out", adelanta el músico sobre el single aparecido en 2004 y que alertó al mundo sobre un conjunto que, además, reporta una estrecha amistad con los chilenos de Pánico.

Los nacionales que viven en París compartieron escenario con Franz Ferdinand en 2008 y hace poco terminaron de grabar su nuevo disco en el mismo estudio donde los escoceses hicieron Tonight... "Paul (Thomson) y Nick (McCarthy) -batería y guitarra del grupo- les recomendaron el estudio donde grabamos (Chem 19, en Glasgow) y Pánico terminó grabando con Gareth Jones, que también produjo nuestro disco. Me parece excelente, van a tener un gran álbum".