El lunes pasado, el fiscal regional de Magallanes, Eugenio Campos, quien investiga el fraude de más de $ 21 mil millones en Carabineros, reveló que la Unidad de Análisis Financiero (UAF) reportó en mayo de 2011 operaciones sospechosas (ROS) realizadas por el ex jefe de gabinete de la Dirección de Finanzas el coronel (r) Arnoldo Riveros, entre 2010 y 2011. Este lunes, el director de la UAF, Javier Cruz, confirmó este antecedente ante la comisión investigadora de la Cámara de Diputados.
Esta unidad informó esta situación que afectaba a Riveros a la Fiscalía Nacional, ajustándose al protocolo que corresponde para este tipo de situaciones. Sin embargo, según fuentes del Ministerio Público, este informe fue derivado a la Fiscalía Centro Norte para que investigara la causa.
Según expuso el fiscal Campos, el 5 de junio, la UAF reportó operaciones sospechosas de parte de Riveros por recibir depósitos de $ 48 millones en un año, siendo que su sueldo era de poco más de $ 1 millón.
No obstante, después de realizar distintas diligencias en el caso, incluida la toma de declaraciones de algunos uniformados, el fiscal que llevaba los peritajes, el entonces fiscal de Alta Complejidad, José Morales, archivó la causa, según indicaron las fuentes antes mencionadas. Al interior del equipo investigativo del fiscal Campos, se desconoció por qué se aplicó este término judicial, por lo que se solicitaron los antecedentes del archivo, los que finalmente llegaron a manos del persecutor del fraude. Según fuentes del caso, en la investigación de Morales no se logró establecer el delito base del lavado de activos.
El presidente de la comisión investigadora del fraude en Carabineros, el diputado DC, Jaime Pilowsky, dijo que "hubo un reporte de operación sospechosa que la UAF envió al Ministerio Público. La pregunta es qué pasó con este reporte que precisamente hablaba de situaciones anómalas de un funcionario formalizado. De haberse investigado más a fondo esta denuncia, se podría haber descubierto antes este fraude".
Funcionario de la Dipres
Además del director de la Unidad de Análisis financiero, también llegó hasta la comisión investigadora el funcionario de la Dirección de Presupuesto (Dipres), Hugo Zúñiga, quien desde 1972 se desempeña en el organismo como encargado de aprobar el presupuesto para organismos como las Fuerzas Armadas y Carabineros.
El es uno de los imputados en la causa, aunque aún no ha sido formalizado por el fiscal Campos. La fiscalía indaga supuestos pagos en su condición de funcionario público de parte de algunos ex uniformados para que consiguiera más recursos para la institución y así esconder las consecuencias del fraude. Sin embargo, Zúñiga descartó todas las imputaciones en su contra ante la comisión y respondió que "no, no recibí pagos". Además, los diputados le consultaron por su relación con los generales de Finanzas de la institución y sostuvo que "los conocí por el trabajo que desempeñaba. No sé por qué he salido mencionado en esta indagatoria y lo más probable que cuando termine la investigación lo sepa".
Sobre el general (r) Flavio Echeverría, último jefe de esa unidad, y hoy formalizado, señaló que "Carabineros estaba tratando de construir un edificio institucional al lado de la Dirección General, entonces, la jefatura me lo encarga para que yo vea la factibilidad de eso, por lo que yo lo llamo (a Echeverría) porque estábamos viendo presupuesto 2017, y en mi oficina me entregó un boceto de lo que iban hacer. Al final no recibió recursos y el proyecto quedó en nada".
En tanto, se excusaron de asistir a la comisión los ex generales de Finanzas, Iván Whipple y Julio Pizarro.