La jornada partió en una cafetería de Providencia. Eduardo Frei y Andrés Velasco aparecieron sonrientes y comiendo medialunas ante una decena de camarógrafos. La cuenta la pagó el ministro de Hacienda, quien había llegado al lugar a bordo de un taxi. La segunda escena ocurrió cerca de 30 minutos después, cuando el abanderado y el economista llegaron juntos a Estación Central, donde realizaron una actividad "puerta a puerta" en la población Los Nogales.
Sin corbata y en tenida sport, Velasco y Frei visitaron primero un club deportivo de la comuna. El director del recinto les contó una anécdota. El ex Presidente Ricardo Lagos, durante una visita al mismo lugar en su campaña de 1999, tomó una bebida y, antes de despedirse, fue al baño. "Como cábala, usted debiera hacer lo mismo", le comentó después. Entre risas, Frei le hizo caso, cumplió el mismo ritual y luego se trasladó con Velasco a visitar dos casas del lugar.
Al término de la actividad, el candidato y el secretario de Estado hablaron juntos. "Estoy muy contento de poder estar aquí, en categoría de ciudadano, acompañando a mi candidato, futuro presidente, Eduardo Frei", afirmó el economista.
"Quiero agradecer a Andrés por su presencia, somos parte de un equipo, somos parte de una coalición que le ha dado gobernabilidad a Chile", respondió Frei, en medio de la atenta mirada de algunos miembros del comando que llegaron al lugar, como su jefe de comunicaciones, Pablo Halpern, quien tiene una estrecha relación con Velasco.
INQUIETUD DE LA MONEDA
La señal de unidad del ministro mejor evaluado del gabinete y el candidato surge a ocho semanas de las elecciones y cuando el distanciamiento de Velasco por decisiones del comando preocupaban a La Moneda. El tema lo vieron en la casa de gobierno el viernes pasado, al ser consultados por las diferencias. Si bien negaron roces, adelantaron que iba a existir un guiño entre ambos. Ese día, dicen en el comando de Frei, se organizó la salida conjunta del candidato y el economista.
Velasco ha discrepado de la decisión del comando de Frei de impulsar las reformas laborales, pues, según la tesis que ha defendido al interior del gobierno, sería contraproducente en medio de la recuperación económica. Sus reparos se lo manifestó al jefe del equipo económico, Oscar Landerretche, con quien mantiene contacto. En agosto no compartió que el abanderado abogara ante la CUT por un nuevo código laboral junto al ex ministro del Trabajo Osvaldo Andrade.
Personeros del comando señalan que estos hechos, entre otras cosas, reforzaron la idea de Velasco de que debe permanecer en el gabinete y no desembarcar en el comando, como varios dirigentes han evaluado. El tema no es indiferente en el oficialismo, en momentos en que la campaña enfrenta momentos difíciles y cuando en La Moneda existe consenso de que deben jugarse por el candidato.
Ayer, al ser consultado si Velasco tendrá un rol más protagónico en la campaña, Frei respondió: "No apuremos los bueyes".
Durante una de sus conversaciones, el ministro le preguntó ayer al candidato las actividades que tenía agendadas en los próximos fines de semana. Frei se las mencionó.
Horas después, Sebastián Piñera cuestionó la actividad. "En un buen gobierno, para ejercer con liderazgo, son los presidentes los que deben apoyar a los ministros y no al revés". Marco Enríquez ironizó con el tema y dijo que él tenía el mejor candidato a diputado, en referencia a Alvaro Escobar.