Hosni Mubarak, quien gobernó Egipto por 30 años hasta ser derrocado en una revolución de la "Primavera Arabe" el año pasado, está inconsciente y conectado a un respirador, pero no se encuentra clínicamente muerto, dijeron hoy a la agencia Reuters dos fuentes de seguridad.

"Está completamente inconsciente. Está usando un respirador artificial", dijo una fuente militar, luego de que la agencia estatal de noticias Mena reportara que el depuesto mandatario estaba "clínicamente muerto" tras su traslado a un hospital.

Otra fuente de seguridad dio la misma información y desestimó el reporte de la agencia Mena al decir: "Aun es muy pronto para decir que está clínicamente muerto".

Uno de los abogados de Hosni Mubarak dijo a su vez a la agencia Ansa que "el ex Presidente está todavía con vida, pero está en coma". Similar declaración efectuó a la cadena televisiva CNN un general del Consejo de las Fuerzas Armadas.

El ex hombre fuerte del antiguo régimen llegó al hospital de Maadi en ambulancia y escoltado por cuatro vehículos blindados, que partieron de la cárcel de Tora.

Fuentes de seguridad de la cárcel dijeron que el ex mandatario egipcio sufrió dos paros cardíacos y que fue estabilizado gracias a un desfibrilador de la enfermería donde se encuentra. Los médicos usaron un respirador artificial para regularizar la respiración del paciente.

Luego la agencia Mena -que citó fuentes de seguridad- precisó que Mubarak sufrió un ictus y los especialistas convocados de urgencia evaluaban su estado de salud.

Anteriormente uno de los abogados defensores del ex "rais", Yousri Abdel Razek, informó que se realizaban intensos diálogos con las autoridades para decidir su traslado urgente al hospital militar Maadi.

Mubarak, que cumple una condena a cadena perpetua, fue internado en terapia intensiva del hospital Maadi durante el juicio.

El 2 de junio pasado un tribunal de la capital egipcia condenó a Mubarak y a su ex ministro del Interior Habib El Adli, ambos considerados responsables por el crimen de 846 manifestantes luego del 25 de enero de 2011, durante las protestas populares.

La revolución ciudadana derivó en la renuncia de Mubarak el 11 de febrero de 2012.