No hubo mención a la situación de los abusos sexuales, como en Chile, pero sí a la corrupción. En su discurso en el Palacio Pizarro, ante la sociedad civil de Perú, encabezada por el Presidente de la República Pedro Pablo Kuczynski, el Papa insistió en su defensa al medio ambiente y aseguró que "trabajar unidos para defender la esperanza exige estar muy atentos a esa otra forma -muchas veces sutil- de degradación ambiental que contamina progresivamente todo el entramado vital: la corrupción". Para luego agregar: "cuanto mal le hace a nuestros pueblos latinoamericanos y a las democracias de este bendito continente ese virus social que lo infecta todo".
El mensaje del Pontífice se da en un país que enfrenta una serie de investigaciones abiertas contra varios ex presidentes y políticos por recibir pagos irregulares. El propio PPK estuvo al borde de ser destituido en diciembre tras conocerse que había mentido y había recibido pagos de Odebrecht cuando era ministro de Economía. El antecesor de PPK, Ollanta Humala, cumple prisión preventiva por otro caso ligado a Odebrecht y el ex presidente Alejandro Toledo está prófugo de la justicia en EE.UU. Además, Alberto Fujimori, recién indultado por PPK, tuvo que renunciar tras un masivo escándalo de corrupción en el año 2000.
El Papa, que tuvo que cambiarse de vehículo desde su viaje del aeropuerto, porque pinchó una rueda, fue recibido en el el Palacio Pizarro por Kuczynski. Un PPK muy debilitado políticamente pidió al Papa "un empujón hacia la paz y el dialogo".