El cuerpo sin vida de una niña de cinco años fue sacado hoy de las aguas de un río en el norte de Haití, lo que elevó a 17 el número de muertes causadas por las torrenciales lluvias que desde hace varios días sacuden esa zona del país.
El cadáver de la niña, que había sido dada como desaparecida, fue hallado en la comunidad de Haut du Cap, cerca de Cabo Haitiano (norte), donde las autoridades de socorro buscaban también otros cuatro cuerpos arrastrados por las aguas del río.
Los medios de prensa haitianos informaron ayer que de acuerdo con el jefe de la policía de Cabo Haitiano, Pierre Kenel, sus patrullas habían rescatado 16 cadáveres de las calles y ríos de la zona, por lo que el rescate hoy del cuerpo de la niña sitúa en 17 el número de víctimas mortales.
Las plantaciones cercanas al lugar también sufrieron serios daños por los niveles de desbordamientos de los ríos, mientras militares chilenos de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) recorrían sus calles así como las de Cabo Haitiano.
Las lluvias más intensas se registraron en las ciudades de Port-de-Paix, Saint-Louis du Nord y Anse-à-Foleur, en el norte y noreste de Haití.
Fuentes de prensa locales aseguraron que muchos residentes de Cabo Haitiano y de comunidades cercanas levantaron barricadas en las calles el sábado para ejercer presión sobre las autoridades en reclamo de que estas vayan en su auxilio.
Entre las comunidades afectadas, además de Haut du Cap se cuentan Limonade, Borgne y Margot.
Un total de 1.573 lugareños se vieron obligados a abandonar los sitios donde habitaban y se desplazaron a catorce albergues a causa de las precipitaciones, informaron fuentes de la Dirección de Protección Civil (DPC).
La situación se vio agravada por la saturación de suelos y las construcciones anárquicas de la zona, que obstruyen los canales naturales de drenaje.
Haití trata de recuperarse de los dañinos efectos que hace pocos días causó, a su paso por el Caribe, el huracán "Sandy", que dejó 54 muertos, veinte desaparecidos y una veintena de heridos, según cifras oficiales.
Este cuadro ha impulsado a las autoridades haitianas a solicitar la ayuda internacional para enfrentar una crisis humanitaria que afectaría a unas dos millones de personas, según cifras ofrecidas por oficinas de las Naciones Unidas en Haití.
El Gobierno de Haití y la ONU clamaron el jueves por un auxilio internacional de 39 millones de dólares para hacer frente a las necesidades urgentes de los afectados, así como para restablecer la operación de centros de salud, escuelas, reparar caminos y carreteras y acueductos.
Ese mismo día, la Comisión Europea anunció la donación de 6 millones de euros (unos 7,6 millones de dólares) para atender a víctimas de "Sandy" en el Caribe, la mayoría de cuyos recursos estarían destinados a Cuba y Haití.
Asimismo, el viernes pasado la embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe anunció una ayuda no reembolsable de 6,1 millones de dólares en favor de los desplazados por el fenómeno.