El ex presidente peruano Alberto Fujimori clamó su inocencia el lunes y exigió ser absuelto de los cargos de peculado en el juicio por desvío de fondos públicos a favor de diarios para que apoyen su segunda reelección en el año 2000.
"Pido a la sala me absuelva en todos los cargos imputados injustamente por el ministerio público", afirmó Fujimori (1990-2000) dirigiéndose al tribunal de tres magistradas durante su alegato final en éste proceso.
La intervención de Fujimori ante el órgano que preside la jueza Aissa Mendoza, que duró cinco minutos y fue transmitida en directo por un canal de televisión, marcó el fin de 14 meses de audiencias del último proceso judicial iniciado en su contra por presuntos delitos cometidos durante los 10 años en que gobernó Perú.
"No soy el autor en lo más mínimo de los actos delictivos que se han juzgado en este proceso", sostuvo el exmandatario, quien lleva ocho de sus 76 años de edad en prisión.
Este caso se basa en la acusación fiscal del desvío de 122 millones de soles (unos 40 millones de dólares) del presupuesto de las fuerzas armadas a un grupo de diarios sensacionalistas que apoyaron su segunda reelección en 2000, insultando y difamando a los opositores a su gobierno.
Fujimori, de origen japonés, rechazó también las imputaciones de haberse enriquecido durante su gobierno, al resaltar que "mi vida ha sido austera, alejada de los lujos y la frivolidad".
Por su lado, el procurador anticorrupción, Joel Segura, dijo a periodistas al retirarse del juzgado que "ha quedado claro que (Fujimori) debe asumir su reponsabilidad. Los dichos son una prueba y confirman la tesis de la fiscalía del desvío de fondos para respaldar la reelección" en el año 2000.
"Creo que habrá una sentencia condenatoria", acotó el procurador del Estado.
La sentencia se conocerá el 7 de enero de 2015, anunció por su parte la jueza Mendoza al cerrar la etapa de las audiencias.
La fiscalía pidió ocho años de prisión para Fujimori, quien cumple desde 2007 una condena de 25 años como autor mediato de dos matanzas (de Barrios Altos y La Cantuta) durante su gobierno en las que un escuadrón de la muerte asesinó a 25 personas -incluido un niño- acusadas erróneamente de pertenecer a la guerrilla de Sendero Luminoso.
En Perú las penas no se acumulan sino que rige la mayor sanción, por lo que un presunto fallo en contra de Fujimori no modificaría su situación carcelaria.