En la sede de la Anef, funcionarios de Sernageomin se refirieron a la tragedia ocurrida en la mina San José de Copiapó, donde 33 mineros permanecen atrapados, y criticaron la falta de facultades y de personal para poder fiscalizar estas labores.
El director de los funcionarios de Sernageomin, Luis Enrique Lira, señaló que "la facultad que se entrega (...) del punto de vista jurídico, es débil", porque "la sanción no corresponde a la gravedad del hecho".
Al mismo tiempo, añadió que "es un proceso que no está normado debidamente, por eso es que el año 2008 el Departamento de Seguridad Minera solicita (...) todas estas modificaciones a la reglamentación".
Lira explicó que dicho reglamento, sobre las atribuciones y sanciones del Servicio Nacional de Geología y Minería, establece que los funcionarios estarán facultados en el cumplimiento de sus labores inspectivas y de investigación para ingresar a inmuebles, lo que a juicio del representante de los funcionarios de Sernageomín en la práctica "no es posible hacerlo".
Finalmente, manifestó que "a nuestro juicio la responsabilidad que nos cabe en el tema está dada (...) en primer término por nuestra precariedad presupuestaria" y agregó que existe "un tremendo déficit de personal, precisamente en esta materia, que es la que apunta a resguardar la vida del trabajador minero y ese déficit se evidencia en la cantidad de inspectores de seguridad que están destinados a fiscalizar las faenas mineras", los que en total alcanzan los "16 inspectores a lo largo de todo el país para fiscalizar una cantidad aproximada superior a las 4 mil faenas en el país."
Por su parte la Anef mediante una declaración pública señaló que "la situación producida evidencia la precariedad y debilidad de las normas de seguridad en la mediana y pequeña minería en la que trabajan, en total, más de 90.000 trabajadores (as) en nuestro país. Esta tragedia, de la cual el país está siendo testigo es, en primer lugar, responsabilidad de la empresa que, en pleno conocimiento de las falencias de seguridad de sus instalaciones, denunciadas por los propios trabajadores mineros, no tomó las medidas necesarias para subsanarlas y mantuvo la explotación del mineral".
"Por todo lo anterior, la Anef y la Asociación de Funcionarios de Sernageomín, además de lamentar la tragedia y reiterar la solidaridad con los afectados y sus familias, exigen el fortalecimiento de este Servicio Público mediante la aprobación de las nuevas condiciones presupuestarías planteadas y su reorientación para ejercer cabalmente la función fiscalizadora que le corresponde, mediante la aprobación de un marco legal que otorgue a la Institución las facultades necesarias para ejercer un control efectivo, que garantice la producción minera en condiciones laborales y de seguridad acordes con los estándares que la OIT preconiza para los trabajadores, tanto públicos como privados".
