Los fundadores del movimiento pro democracia de Hong Kong se entregaron a la policía el miércoles, una rendición simbólica consecutiva al llamado a cesar las manifestaciones y a participar en el debate sobre las reformas políticas.

Al cabo de más de dos meses de ocupación de varios barrios de la ex colonia británica, el movimiento no obtuvo ningún resultado concreto y quedó dividido entre los que aspiran a radicalizar la movilización y los que quieren cambiar de forma de lucha.

Benny Tai, Chan Kin-man y Chu Yiu-ming, fundadores de Occupy Central, el movimiento de desobediencia civil creado a comienzos de 2013, y el primero en lanzar la ocupación de las calles, proponen ahora un giro estratégico orientado hacia una acción más política.

Escoltados por decenas de militantes que esgrimían paraguas amarillos, el emblema del movimiento pro democracia hongkonés, los tres dirigentes entraron en una comisaría del centro de la ciudad pidiendo ser detenidos por "participación en una reunión no autorizada".

Los tres dirigentes salieron de la comisaría rápidamente en la medida de que no existe ninguna orden de detención contra ellos, a pesar de que las autoridades locales como el gobierno chino reiteraron que el movimiento de protesta era ilegal.

"No fuimos detenidos, por lo cual se nos permite salir sin que se restrinja nuestra libertad", declaró Benny Tai.

"Sin embargo no creo que eso resuelva el asunto. Podemos ser detenidos más tarde o procesados por delitos más graves. Hay que esperar y ver", agregó Tai.

También se presentó a la comisaría para ser detenido el cardenal Joseph Zen, de 82 años, ex jefe de la iglesia católica de Hong Kong, firme opositor al Partido Comunista de China. Detrás del cardenal, decenas de militantes hacían cola para imitarlo.

Los enfrentamientos del domingo 30 de noviembre, los más graves registrados desde el inicio de la protesta el 28 de septiembre pasado, empujaron al  movimiento pro democracia a un giro estratégico, estimaron los especialistas.

Sin embargo, Joshua Wong, uno de los responsables estudiantiles del  movimiento pro democrático de Hong Kong y otros dos líderes continuaban la huelga de hambre iniciada el lunes.

Wong y dos mujeres del movimiento, Lo Yin-wai y Wong Tsz-yuet, explicaron  que quieren presionar para que el gobierno de Hong Kong responda a sus reivindicaciones de que en 2017 las elecciones en este territorio chino sean totalmente libres.