Según el estudio "Radiografía del consumidor de energía chileno", realizado por Collect GFK, los hogares del país incrementan su gasto en energía en 55% en los meses de invierno respecto del resto de los meses del año.
El sondeo, realizado entre 860 personas de las distintas zonas del país con un margen de error muestral de 3,3%, señala que el gasto de los hogares en energía promedia $ 52.542 en el invierno, frente a los $ 33.847 en los restantes meses del año; es decir, un alza del 55%.
La leña, parafina y gas natural anotan los mayores ascensos, con 129%, 46% y 42%, respectivamente. Así, mientras en otras épocas del año un hogar promedio gasta $ 17.342 mensuales en leña, en invierno sube a $ 39.777.
Los combustibles que presentan los menores aumentos son GLP de cilindro (40%), electricidad (30%) y gas licuado de estanque (16%). En este último caso, la cuenta mensual promedio pasa de $ 18.695 en los meses menos fríos a $ 24.389 en el período invernal.
Mientras en la zona norte las diferencias entre uno y otro período son de 7%, en el caso de la zona central sube 54% y en la zona sur 74%.
Por zonas, los combustibles más usados tienen que ver con factores climáticos, disponibilidad y acceso. En el norte del país, el 64% del gasto en energía en los hogares se lo lleva el GLP de cilindro, seguido por la electricidad (27%) y el GLP de estanque (7%). En el centro, el GLP tiene el 67% de participación, luego la parafina (16%), electricidad (11%) y el gas natural (3%). En el sur, el GLP representa el 36% del gasto de los hogares, seguido por la leña (35%) y la electricidad (21%).
Factores de preferencias
La conveniencia económica de los combustibles y también sus niveles de seguridad fueron valorados por los encuestados. En el primer caso, el 39,1% de los consultados señaló al gas licuado de cilindro como el más conveniente en precio, seguido por la electricidad (26,2%), leña (13,3%), parafina (7,7%), gas licuado de estanque (5,9%) y gas natural (3,2%).
En seguridad, las principales menciones fueron para la electricidad (53,7%), gas licuado cilindro (27,2%), leña (6,4%) y gas natural (5,7%).
Consultados por la mejor fuente de energía para usar en el hogar, 41,3% opta por la electricidad, seguida del gas licuado de cilindro (36,6%), leña (9,7%), gas natural (5,7%), gas licuado de estanque (3,4%) y parafina (1,9%).
"Tanto la electricidad como gas licuado fueron elegidos como las mejores fuentes de energía para usar en el hogar. Esto se debe a la percepción de ser fuentes de energía seguras o con una buena relación costo-beneficio, que son los principales factores que inciden en la elección de una fuente de energía. La comodidad en su uso también fue motivo para preferir ambas fuentes de energía", señala el estudio.
Los usos que se les da en los hogares a las fuentes de energía son principalmente tres: calefaccionar, agua caliente para ducha, lavado y cocinar o calentar alimentos. El GLP es dominante, pues en las tres categorías es utilizado entre el 41% y 88% de los hogares. Le sigue la leña, con un uso entre 2% y 23%; la electricidad, entre 9% y 16%, y la parafina (28% la usa mayoritariamente para calefacción). Del total del gasto en energía del hogar, el 58% corresponde al GLP de cilindro, seguido por electricidad (15%), parafina (10%), leña (10%), gas natural y GLP de estanque (3% cada uno).