A la comisión de Defensa de la Cámara Baja llegó esta tarde el general de la Fuerza Aérea, comandante Jorge Rojas, para exponer sobre el accidente del avión Casa 212, que se estrelló en el archipiélago de Juan Fernández en septiembre de 2011.

Durante casi tres horas, la máxima autoridad a cargo de la institución expuso los antecedentes requeridos por los legisladores, a la luz de las nuevas informaciones desveladas a través de la prensa, y que apuntarían a problemas de mantenimiento del avión y al sobrepeso del mismo, al momento del viaje.

PRIMERAS PALABRAS DE LA EXPOSICIÓN DE ROJAS

A su llegada al Congreso, la autoridad afirmó que "vengo a entregar todos los antecedentes que dispongo", por cuanto "la Fach siempre ha actuado con transparencia. La institución nunca ha distorsionado ni ha negado ningún tipo de información".

"Nosotros, la Fach, reconocemos tener responsabilidad en que se hayan producido algunas confusiones, porque no hemos manejado la entrega de información probablemente con la suficiente claridad, eso lo reconocemos y queremos enmendarlo", adujo.

 "Es por esa razón que, para entregar el máximo de transparencia y acogernos a esta verdad, hemos solicitado a la Comisión de Defensa que esta invitación sea cursada en forma pública de modo que toda la opinión pública pueda tener acceso a la información que vamos a entregar", planteó.

CRÍTICAS AL MANDO Y COMUNICACIÓN EN LA FACH 

El directivo de la Fuerza Aérea respondió a las críticas respecto a los problemas que existirían en el liderazgo de la institución, ante lo cual espetó que, "con la excepción del retiro del general Bertens y de los elementos de peso, no creo que haya problemas de conducción ni ascendiente del mando", al interior de la Fach.

A su vez, agregó que "yo quiero reconocer que nosotros no hemos tenido los mecanismos de comunicación pública que nos permitan contrarrestar eso, en virtud de que – y lo reconozco hidalgamente- no es la virtud de la Fach".

Rojas añadió que, "dentro del marco de este accidente que es una catástrofe nacional", se reconoce que "la Fuerza Aérea no tiene todas las estructuras necesarias" para reaccionar de inmediato.

"Tampoco tuvimos una estrategia relacionada con este tema, porque ninguna organización está preparada para un evento tan dramático y tan conflictivo y tan trágico como este. Este es un shock que, la verdad, afecta a cualquier institución", remarcó.

TRANSPARENCIA EN LA COMUNICACIÓN

A juicio del general de la Fach, "lo más importante -y que quiero decir- es que la Fach no ha entrado en contradicciones, a lo mejor no ha sido lo suficientemente comunicativa y no ha podido contrarrestar los efectos de  la información que ha sido entregada por algunos sectores a través de la prensa, lo que pudo haber generado confusión en la opinión pública", argumentando que "hemos entregado en el marco de la máxima transparencia".

El uniformado aseveró que "la única manera de que se pueda saber lo que sucedió es respetar el debido proceso", así como "la ley no nos faculta para estar entregando la información a cada rato".

No obstante,  acotó que se consideró en la institución que, ante  el dato del exceso de peso, se optó por aclararlo públicamente.

RESPUESTA EN TORNO AL SOBREPESO DEL AVIÓN

Rojas planteó que "habiendo un sobrepeso aproximado de 164 kilos, en el momento del despegue era de 134 y, a veinte minutos del despegue, el avión estaba en su peso normal", puesto que se habría equiparado con el continuo gasto de combustible, en varias toneladas.

El general también precisó que la información que se manejaba sobre el exceso de carga "era un dato preliminar que estableció el cuerpo de combate", pero que la información fehaciente de la bitácora del  avión se perdió al estrellarse en la isla.

La autoridad aeronáutica expuso que, "a partir de un proceso forense se llegó a la conclusión de que, en términos concretos, el peso del avión se había excedido al momento del despegue", pero que esto "no era una mal intención ni (afán) de ocultar información".

Respecto de la posibilidad de haber contado con menor cantidad de combustible. dado el exceso de cargamento, Rojas arguyó que "por los antecedentes que tenemos, el avión habría salido con su carga completa, de 3400 libras".

COORDINACIÓN CON EL MINISTERIO DE DEFENSA

El general indicó que "siempre se ha dispuesto un máximo de transparencia", y que "el ministro de Defensa ha sido informado solo de aquellos aspectos que son relevantes, en el marco de la investigación".

Así, añadió que "al ministro de Defensa se le han entregado permanentemente aquellos aspectos que es necesario que se conozcan", en el marco de la investigación.

DETALLES DE LAS FALLAS Y LAS REALES CONDICIONES DEL AVIÓN

El comandante en jefe de la Fach resaltó que, en relación con los desperfectos que tendría la aeronave – en particular, las trizaduras que presentaba -  , "hay otras 18 observaciones que no afectarían la navegabilidad del avión, ni la seguridad del vuelo". 

"El avión no tenía fallas y estaba en perfecto funcionamiento", sentenció Rojas,  atribuyendo como fuente los antecedentes de los que dispone.

A su vez, argumentó que el viaje a Juan Fernández se produjo en el marco de los ejes de responsabilidad social de la Fach, y que, no obstante, "creemos que lo que vamos a aprender de esto nos va a ayudar a construir una mejor Fuerza Aérea". 

Consultado por los legisladores por cuál sería la real razón del accidente, Rojas acotó que "no quiero ni puedo pronunciarme respecto a ese tema", debido a que las responsabilidades y conclusiones se conocerán una vez que se dé a conocer el fallo que sucederá al sumario del ministro en visita.

El uniformado aseguró que "estamos modificando nuestros procesos y vamos a mejorarlos", para efectos de minimizar las posibilidades de que este tipo de accidentes se repitan.

SOBRE QUIÉN ESTABA CONDUCIENDO AL MOMENTO DEL IMPACTO

Rojas estableció que "ambos tripulantes de cabina eran pilotos calificados. No obstante, la autoridad máxima del avión es el comandante de aeronave, que es quien toma las decisiones, en este caso, la teniente Carolina Fernández". 

Asmismo, señaló que "el avión tiene doble comando", y que, por ello, se podía traspasar en tres segundos el manejo de la nave, según se estipula en el "código de conducta" de vuelo.

EVENTUALES PRESIONES PARA REALIZAR EL VUELO Y DISPOSICIÓN A DEJAR EL CARGO

Sobre este ítem, el comandante en jefe planteó que "no habría presiones, me dice el jefe del Estado Mayor", y agregó que "el vuelo originalmente debió haberse realizado el 19 de agosto y no el 2 de septiembre".

El general de la Fach repuso, además, que "mi cargo está a disposición de su Excelencia cuando él lo estime conveniente", sin embargo, señaló que "es responsabilidad del comandante en jefe dirigir la institución, las operaciones y mantener en pie a la institución"y que, en esa línea, no podía presentar su renuncia tras la crisis.