Un equipo de científicos que decodifican la historia genética de los humanos al rastrear las mutaciones de genes, han aplicado la misma técnica para descifrar el origen de uno de los textos más antiguos del mundo de occidente: la Iliada.

De acuerdo a los cálculos de los expertos, Homero probablemente escribió el libro en el año 762 a.C, con un rango de 50 años de error. Esta fecha coincide con lo calculado por los historiadores.

Los científicos que decidieron estudiar el poema épico fueron Mark Pagel, un teórico de la evolución de la Universidad Reading en Inglaterra; Eric Altschuler, genetista de la Universidad de Medicina y Odontología de Nueva Jersey (Estados Unidos); y Andreea S. Calude, lingüista de la U. de Reading y del Instituto de Santa Fe en Nuevo México.

Según Pagel, que los genetistas se interesen en un proyecto como éste no debería ser sorpresa, pues señala que "el lenguaje se comporta igual que los genes. Son directamente análogos".

Para descubrir la fecha de la publicación del libro, los científicos rastrearon las palabras de la Iliada como si fueran genes en el genoma. Utilizando una compilación de palabras conocida como la Lista de Swadesh, la cual fue confeccionada en los años '40 y '50 por el lingüista Morris Swadesh. La lista contiene aproximadamente 200 conceptos que tienen palabras que se repiten en cada lenguaje y en cada cultura. De acuerdo a Pagel, las palabras de la lista son generalmente partes del cuerpo, colores y relaciones necesarias como "padre" y "madre".

Los expertos lograron encontrar 173 palabras Swadesh en la Iliada, y luego midieron cómo cambiaron en el tiempo. Basándose en el lenguaje de los Hititas, un pueblo que existió durante aquél período, y el griego moderno, los científicos lograron trazar los cambios de las palabras de Hititas a las homéricas y luego a las modernas. 

Al documentar la regularidad lingüística de estas mutaciones de las palabras, Pagel y su equipo de expertos lograron realizar una línea de tiempo de la Iliada y su fecha de su publicación.

El estudio fue publicado en la revista Bioessays.