El actor y director estadounidense George Clooney anunció hoy que "a finales de septiembre" rodará un filme en la localidad de L'Aquila, una de las más afectadas por el terremoto que devastó la región de Los Abruzos, en el centro de Italia, el pasado 6 de abril.
Así lo ha anunciado durante su visita a la ciudad, que en estos días acoge la cumbre de jefes de Gobierno y de Estado del G8 y durante la que manifestó que él tendrá un papel en la película que se rodará en la capital de Los Abruzos.
"Habíamos examinado las localizaciones ya antes del terremoto y las hemos vuelto a ver. Es sorprendente ver que la ciudad ha sufrido tantos daños y creo que este es el mejor modo para ayudar a relanzar la economía".
El director de Buenas noches y buena suerte estuvo acompañado en su visita por el también actor Bill Murray y por el ex secretario del Partido Demócrata italiano (PD) Walter Veltroni.
"Me siento cercano a esta tierra y el mundo debe ayudar a estas personas. La gente quiere regresar a su casa", declaró el protagonista de la saga La gran estafa, que sorprendió a los curiosos por su disponibilidad y porque no iba acompañado de un importante dispositivo de seguridad.
"En Los Angeles estamos acostumbrados, yo he vivido dos grandes terremotos pero ninguno provocó daños parecidos", agregó.
Antes de trasladarse a L'Aquila, Clooney visitó uno de los campamentos de evacuados por el terremoto, al que llegó en helicóptero en medio de una gran expectación de periodistas y curiosos.
Está previsto que en las próximas horas Clooney participe en la inauguración de una sala de cine y un espacio polivalente, la Nobel Peace Hall, junto a Murray y a la Nobel de la Paz Betty Williams, que obtuvo este reconocimiento en 1976 por su labor como impulsora de la paz en Irlanda del Norte.
Se trata de una iniciativa que nació a iniciativa de un grupo de víctimas del terremoto con el apoyo de la asociación "Arti e Spettacolo", para promover una serie de actividades culturales como motores de la reconstrucción de la zona.
El ganador de un Oscar como secundario en 2005 por su papel en el filme Syriana, explicó que le parece "muy importante prestar atención a un territorio tan devastado por el sismo" y añadió que si su presencia ayuda "a llamar la atención de los medios" él "es feliz".