La telenovela de Giedo van der Garde con Sauber llegó a su final. El piloto holandés decidió no continuar con las acciones legales que tenía contra su equipo en la justicia australiana.

Van der Garde, reserva de la escudería el año pasado, fue despedido por problemas financieros, mientras Sauber fichó al brasileño Felipe Nasr y al sueco Marcus Ericsson, que llegaban con dineros frescos.

El piloto llevó su caso a las cortes oceánicas alegando que poseía un contrato anterior y que debía correr en Australia, lo que fue apoyado por la justicia. Sin embargo, Van der Garde no pudo presentarse en las pruebas libres del viernes por no tener la superlicencia.

No obstante, el holandés afirmó a través de su fanpage de Facebook que decidió sacar la demanda "con respeto a los intereses del motorsport y de la F1 en particular", después de llegar a un acuerdo con Sauber del cual no se han dado detalles.

"Como soy un piloto apasionado esta decisión es muy difícil para mí. Pero deseo respetar el interés de la FIA, Sauber y también el de Nasr y Ericsson", declaró.

De esta forma, Sauber presentará a sus pilotos oficiales en la primera fecha de la campaña en Melbourne, esta madrugada del domingo.