El gobernador de Carolina del Sur, Mark Sanford, intentaba hoy reconciliarse con sus cercanos tras reconocer su relación amorosa con una mujer argentina.
Sanford se reunió con su esposa y sus cuatro hijos en su casa de playa en la Isla Sullivan, dijo su vocero Joel Sawyer. Añadió que Sanford ha pasado los últimos dos días estableciendo contacto y expresando sus disculpas con diversos funcionarios y allegados.
Tanto Sanford como su esposa expresaron su interés en lograr una reconciliación.
Hace una semana, Sanford desapareció del ámbito público y corrió la voz de que estaba de excursión por los Montes Apalaches. Pero el miércoles admitió que estuvo en Argentina paseando con una amante que tenía en ese país.
Entretanto, el ex jefe de personal y amigo de Sanford, el senador Tom Davis, declaró hoy que la confesión del gobernador lo tomó totalmente por sorpresa.
Davis, en entrevistas con programas matutinos de entrevistas de los canales CBS y ABC, vaticinó que Sanford no renunciará, pero añadió que queda por ver la reacción del pueblo de Carolina del Sur en los próximos días. El pueblo de ese estado, aseveró, se caracteriza por su generosa disponibilidad de perdonar.
Sanford enfrentaba cuestionamientos legales y éticos mientras bregaba por conservar su puesto.
El titular del Senado estatal se preguntó si Sanford violó la ley al desaparecer durante varios días en su viaje a Sudamérica sin entregar el poder al vicegobernador.
"Si las pruebas revelan un esfuerzo consciente por pasar por alto la constitución, creo que habrá un coro pidiendo su renuncia", dijo el senador Glenn McConnell, republicano como el gobernador.
McConnell dijo que Sanford debía responder a preguntas sobre si usó dinero de los contribuyentes en el viaje, pero no pidió una investigación. El vocero de Sanford dijo que no se usaron recursos del estado en la aventura amorosa.
Sanford, que cumplió tres períodos en el Congreso federal como representante de su estado, votó en su momento a favor de hacerle juicio político al Presidente Bill Clinton por razones de "legitimidad moral".
Ahora, se ha precipitado desde las alturas de su posición moral.
Al reconocer su aventura extramarital, el gobernador republicano se encuentra en una situación casi insostenible al término de su mandato, que por razones constitucionales no tiene posibilidad de reelección.
Desde hace años estaba en malas relaciones con la legislatura, dominada por su propio partido, pero dijo últimamente que encontraba apoyo en su campaña para reducir el gobierno y bajar los impuestos.
Su lucha contra el empleo de fondos federales para cualquier cosa que no fuese deuda vencida empezaba a darle una presencia nacional. Como presidente de la Asociación de Gobernadores Republicanos recaudaba dinero para los candidatos, y ya se hablaba de él como posible candidato para las presidenciales del 2012. Su caída produjo estupor.
El gobernador, que dio el miércoles una emotiva rueda de prensa para explicar su ausencia, se disculpó ante su familia y anunció su renuncia a la Asociación de Gobernadores Republicanos.
Según el diario bonaerense La Nación, la amante del gobernador, con la que se entendía desde hace un año, es María Belén Chapur, de 43 años, divorciada con dos hijos, morena y en excelente forma física por su afición al deporte, trabaja en una empresa agropecuaria, además de hablar varios idiomas.
"He sido infiel a mi esposa. Tuve una relación que comenzó con una amiga muy querida amiga de la Argentina. Empezó muy inocentemente, como creo que muchas veces empiezan estas cosas, con mensajes de correo electrónico y consejos sobre su vida allá y mi vida acá. Pero en el transcurso del último año se convirtió en algo mucho más que eso. Como consecuencia, herí a ella, a mi esposa y a mis hijos", dijo el gobernador, de 49 años, en la conferencia, en la que en ocasiones no pudo contener las lágrimas. Agregó que se pasó los últimos cinco días "llorando en Argentina".
Su familia no asistió a la conferencia de prensa y su esposa, Jenny Sanford, reconoció que hace dos semanas había pedido al gobernador que abandonara el hogar conyugal y dejara de hablarle. Mark Sanford indicó que desea reconciliarse con su esposa, y Jenny indicó en una declaración que su esposo se ha ganado la posibilidad de recomponer su matrimonio.
"Esta separación de prueba fue acordada con el objetivo de fortalecer a la postre nuestro matrimonio", aclaró su esposa.
Jenny Sanford, una multimillonaria cuya fortuna familiar procede de la empresa Skil Corp. dedicada a la fabricación de herramientas eléctricas, fue clave en la carrera política de su esposo. Dirigió sus campañas electorales como congresista y la primera para la gobernación de Carolina del Sur. Tienen cuatro hijos.