El gobernador del Banco de Portugal, Carlos Costa, cree que su país precisa de más ahorro de las familias, mayor capacidad de financiación propia, y más crecimiento para superar su grave crisis económica.
En una conferencia en Lisboa, Costa afirmó que no es suficiente para lograr la recuperación de la economía lusa el saneamiento de las cuentas públicas, que entre 2010 y 2011 deben reducirse a la mitad del déficit que registraron en 2009, el 9,3%.
Los problemas económicos de Portugal "superan la consolidación presupuestaria, que es necesaria pero no suficiente", sostuvo el Gobernador, que considera imprescindible reformas estructurales más amplias, además del aumento del ahorro de las familias y la financiación propia de las empresas.
Costa cree que el mayor esfuerzo debe orientarse a aumentar la competitividad de la economía lusa y su capacidad exportadora, pero consideró que, en general, es necesario aplicar más reformas y con mayor profundidad, entre ellas, limitar el crecimiento del gasto público.
El gobernador también abogó por "limitar" los aumentos de impuestos para no restar atractivos a la inversión, y recordó que es necesaria la confianza para que llegue capital extranjero a Portugal, cuya deuda soberana sufre una fuerte presión en los mercados por la especulación sobre la debilidad de su economía.
Costa también se refirió a la situación de la banca lusa y recomendó que venda activos, especialmente créditos, de forma selectiva y refuerce los capitales propios.
Aunque subrayó que el sistema financiero portugués es "sólido" y cuenta con los capitales adecuados a sus niveles de riesgo.