En el primer lugar de la tabla que tendrá la Cámara de Diputados el próximo martes figura la reforma de elecciones primarias para candidatos a Presidente, parlamentarios y alcaldes.
La iniciativa, a la que el gobierno le pondrá "discusión inmediata" -máximo seis días-, deberá ser votada y despachada ese día por la Cámara para pasar, en segundo trámite, al Senado.
El proyecto, que se sumaría a la ley de inscripción automática, deja en manos del Servicio Electoral (Servel) la organización de comicios voluntarios, pero vinculantes para los partidos o coaliciones que opten por esta vía para elegir candidatos.
La reforma, sin embargo, tiene una fecha límite para ser usada en las próximas municipales: debe estar publicada en el Diario Oficial antes del 31 de marzo. En caso contrario, se postergaría para el 2013.
Aunque el plazo puede resultar holgado, el tiempo se acorta si se considera que desde el 23 de enero y hasta el 6 de marzo el Congreso estará en receso. Adicionalmente, una vez finalizado el trámite legislativo, el texto debe ser revisado por el Tribunal Constitucional, que tampoco funciona en febrero, y puede demorarse un mes en su trabajo.
Si la nueva ley es publicada a tiempo, las primarias municipales tienen dos fechas tentativas: el 10 de junio o el 1 de julio. Esta última fecha fue añadida transitoriamente, si es que la entrada en vigencia se aplazaba hasta fines de marzo.
"Existe voluntad política para que esta reforma y la inscripción automática terminen de generar un cambio al sistema democrático", dijo el presidente de la Cámara, Patricio Melero.
El jefe de bancada PPD, Pepe Auth, adelantó que si la reforma logra ser implementada a tiempo, obligará a adaptar el calendario de primarias que tiene la propia Concertación.
El presidente del Senado, Guido Girardi, en tanto, dijo que también prevé una rápida tramitación.
Si bien existe consenso, aún hay discrepancias respecto de las atribuciones que tendrían los consejos regionales de partidos para decretar primarias. También está en discusión el quórum de militantes que puede pedir estas elecciones.
Por el lado del oficialismo, la aprobación de la iniciativa se ha transformado, en los últimos días, en una bandera de lucha para RN, sobre todo con miras a la definición del próximo candidato presidencial del bloque. El tema interesa particularmente al ministro Andrés Allamand, quien ha planteado públicamente la necesidad de que el oficialismo defina en primarias a su abanderado para el 2013.