"Hay un sospechoso de ébola. Les solicito a los pacientes que se dirijan al Sapu o cualquier otro servicio para evitar cualquier riesgo". Así, cerca de las 14.00, el personal del Hospital Barros Luco alertaba por altoparlante que en ese servicio había un paciente que era potencial sospechoso de tener esta enfermedad. De inmediato, según muestra un video tomado en el lugar, los pacientes comenzaron a tapar sus bocas y salir del lugar.

Esa fue la reacción ante la primera activación del operativo que realizó el establecimiento, luego que un trabajador chileno, de iniciales J.G.F. (54), llegara al recinto con un cuadro de fiebre, náuseas y dolores musculares. El 5 de octubre pasado, el paciente volvió de Guinea Ecuatorial (ver infografía), país africano que no ha registrado casos de esta enfermedad. Explicó que trabajaba en una empresa española, que viajaba constantemente a ese lugar y que podría tener malaria. Estuvo desde el 9 de junio en la nación africana. Ante esto, el personal del hospital decidió iniciar el operativo aislándolo y dando aviso al público, como medida de precaución.

Helia Molina, ministra de Salud, explicó ayer que "este no es un caso de ébola, es un probable caso sospechoso y se han tomado las medidas". Sin embargo, la autoridad destacó que tras la alerta "tomamos la decisión como ministerio de ocupar todos los protocolos preparados". Agregó que "no hay ninguna situación de riesgo para el personal que atendió al paciente". Molina dijo que se han monitoreado ocho personas que han arribado al país desde países cercanos al brote, pero ninguna tenía el virus. Después de la activación de estos protocolos, fuentes de gobierno indicaron que se decidió adelantar para hoy la reunión en La Moneda del comité intersectorial del ébola, que estaba presupuestada para el martes. Esta cita será liderada por el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo; el subsecretario de la cartera, Mahmud Aleuy, y la ministra de Salud, Helia Molina. A esta cita también asistirán los ministros de Defensa, Relaciones Exteriores, entre otros.

El subsecretario de Salud, Jaime Burrows, dijo a La Tercera que las muestras extraídas serán remitidas al Instituto de Salud Pública (ISP), para que en 24 horas entregue los resultados.

"Si fuese sospechosa (de ébola) la muestra del ISP, se haría una contramuestra para mandarla a Canadá". "Sabemos que él no informó en su ingreso a Chile que antes había estado en otro país (...) de Africa, que es Guinea Ecuatorial. Porque Guinea sí tiene casos, entonces, personal de la salud no tenía claro si eran dos países distintos o era el mismo país, por eso se activó el protocolo".

Alerta por altavoz

Jeannette Rojo, familiar de un paciente, relató que "por el altoparlante dijeron que había un supuesto caso de ébola.  Nos preocupamos y tratamos de pedir información sobre qué iba a pasar con nuestros familiares", dijo. La forma en que se avisó a los pacientes no consta en los protocolos para tratar el caso, dijeron desde el Minsal.

David Labra, familiar de un paciente, dijo que tras la alerta "evacuaron, y mientras tanto, personas del aseo limpiaban con cloro y papel el lugar donde esa persona había estado sentada".

Una de las primeras autoridades en llegar al lugar fue el diputado socialista Juan Luis Castro. Tras reunirse con el equipo médico, aseguró que hay "dos datos que son valiosos: este paciente es portador de malaria (...). Y el segundo antecedente, es que Guinea Ecuatorial es un país libre de ébola". Agregó que "esto pudiera no tratarse de un caso de ébola, sino que de un recrudecimiento de malaria".

Los funcionarios del hospital, en tanto, dijeron que sólo recibieron mascarillas desechables para evitar el contagio con el virus. "Lo único que nos dieron fue una mascarilla. No estamos preparados para afrentar un caso así", dijo una funcionaria que pidió reserva de su identidad.

René G.F., uno de los cinco hermanos del trabajador internado, dijo que "lo van a tener cinco días en observación", para lo cual fue trasladado al sector de infecciosos del hospital Lucio Córdova.

Una vez dentro del recinto, aseguró que "nos comunicamos a través de papeles que pegamos a la ventana de la pieza en que está. Y él nos respondía con gestos".

La enfermera de Infecciones Asociadas a la Atención de Salud de ese recinto, Paula Leal, dijo que "el paciente quedó aislado y se le realizaron los exámenes. El test rápido de malaria salió positivo".

Según el familiar, hace cinco años que J.G.F. trabaja en la construcción de puentes. Su sistema de turnos consta de cuatro meses de trabajo por 20 días de descanso. Detalló que la fiebre y dolores que padeció su hermano surgieron "porque no se tomó una pastilla que le dan para frenar los síntomas de la malaria". El trabajador tiene dos hijos y ha registrado cinco episodios anteriores de esa enfermedad.