Una nueva y polémica medida sobre quienes viajen al exterior o lleguen a Argentina por avión comenzará a aplicar el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner a partir de 2015. Se trata de la exigencia para las aerolíneas de entregarles a varios entes estatales transandinos, como Migraciones y el ente de impuestos, información pormenorizada sobre los pasajeros que entren o salgan del vecino país. La decisión fue publicada ayer en el Boletín Oficial.
Así, las líneas aéreas deberán entregar 32 datos del pasajero, como su nombre, número de documento de identidad, nacionalidad, fecha de nacimiento, número de asiento, cantidad de equipaje que transporta, número de identificación del equipaje, número total de personas que viajan con él -con los datos de cada uno-, fecha de reserva del vuelo, agencia de viajes, programa de millas, itinerario completo del viaje, información sobre modalidades de pago e historial del pasajero.
Tomás Ryan, ex titular de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo, consultado por Radio Mitre, criticó la medida, al señalar que es "otra traba más (...) para tratar de que la gente no viaje... para parar la salida de dólares".
Al responder a los cuestionamientos, el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip, el ente impositivo), Ricardo Echegaray, dijo que los argentinos podrán seguir viajando al exterior "sin ningún problema", y sostuvo que la información que brindarán las aerolíneas sobre sus pasajeros corresponderá a elaborar "una correcta política migratoria". "El pasajero no tiene que transmitir ninguna información adicional de nada", ya que eso será tarea de las compañías aéreas y las agencias de viaje, dijo el funcionario.
Según el Boletín Oficial, la normativa es "para optimizar los procesos de control y fiscalización, simplificar procedimientos operativos aduaneros, migratorios y de seguridad aeroportuaria, incrementando la eficiencia en la prevención de los delitos, el narcotráfico, el terrorismo internacional, la trata de personas y el tráfico ilegal de inmigrantes".
Los nuevos controles, revelados en una semana en que el precio del dólar en el mercado informal casi duplica el valor oficial de la divisa estadounidense, se suman a las restricciones que el gobierno kirchnerista anunció a fines de 2011 para limitar la caída de reservas internacionales. Entre ellas están la autorización que se requiere para comprar dólares y el recargo que se aplica a las adquisiciones de paquetes turísticos.
La nueva resolución es una medida conjunta de la Afip, la Dirección Nacional de Migraciones, la Administración Nacional de Aviación Civil y la Policía de Seguridad Aeroportuaria.
Para los vuelos de salida o llegada a Argentina, la información de los sujetos reservados para el vuelo debe entregarse por primera vez 72 horas antes del vuelo. Respecto de las salidas del país, los datos deberán ser enviados 30 minutos antes del despegue, antes del cierre de las puertas de la aeronave y una tercera vez, cuando todos los pasajeros hayan abordado el avión.