El gobierno argentino reiteró hoy sus críticas a la petrolera Repsol y afirmó que "no tenía otra opción" que expropiar YPF, que era controlada por la empresa española.

El viceministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que el Estado tomó el control de YPF "para salvarla de la disolución y vaciamiento" en manos de Repsol.

El funcionario hizo estas declaraciones al presentar el denominado "Plan Mosconi", un informe que detalla la "estrategia de depredación, desinversión y desabastecimiento de Repsol".

El relevo fue hecho por el Equipo de Intervención de YPF que tomó el control de la compañía en abril pasado. Según el documento, "la empresa nacional fue expuesta a un desmantelamiento, reducción y desinversión".

Kicillof afirmó que Repsol quería "vaciar la compañía y venderla en el momento justo porque tenía la vocación de irse por el descalabro que habían hecho".

El viceministro destacó que uno de los objetivo de Repsol era intentar que en Argentina "se paguen precios internacionales de combustible como los países que no producen petróleo".

La petrolera argentina presentó a fines de agosto su plan quinquenal 2013-2017, en el que la exploración y producción de hidrocarburos convencionales y no convencionales le demandará inversiones por 37.200 millones de dólares.

La compañía es controlada por el Estado desde la expropiación en abril de la mayoría accionaria que estaba en poder de Repsol. El plan actual aspira a incrementar en un 32 por ciento su producción de petróleo y gas en los próximos cinco años, informó su presidente y CEO, Miguel Galuccio.

La producción y las reservas de gas y petróleo en la Argentina registraron una marcada reducción en los últimos años, hecho que fue tomado por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner como una de las razones para expropiar YPF a Repsol.

La compañía española reclama el pago de un precio "justo" por la petrolera argentina, pero no se logró avanzar en ese punto hasta el momento.

Las reservas comprobadas de gas natural a finales de 2011 de Argentina equivalieron al 50 por ciento de las de diez años antes, según un informe basado en los datos de la Secretaría de Energía difundido por el Instituto Argentino de la Energía General Mosconi.

Las reservas registradas al 31 de diciembre de 2011 sumaron 332.519 millones de metros cúbicos, una cifra que además es un 7 por ciento menor a la contabilizada a fines de 2010.

En tanto, las reservas de petróleo cayeron en 2011 un 2 por ciento respecto al año anterior, y acumulan una reducción del 12 por ciento desde 2002, sostiene el estudio.