El gobierno de Bolivia rectificó su afirmación de que había hallado este martes dos toneladas de uranio y dijo que encontró  "uranio difuminado" en unas rocas encontradas en un garaje en el centro de La  Paz y que se pronunciará con más seguridad tras los exámenes pertinentes.

"Presumimos, inicialmente, preliminarmente, que existe uranio en esos  materiales sólidos, estaríamos ante una figura que debe esclarecerse. Hay un  uranio que posiblemente estaría difuminado en esos materiales sólidos", dijo en  conferencia de prensa el ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero.

El viceministro de Interior, Jorge Pérez, había asegurado más temprano que  se hallaron en el garaje de un edificio de La Paz, a poca distancia de las  embajadas de Brasil, Estados Unidos y Gran Bretaña, "cerca de dos toneladas" de  uranio, y que se trataba de material "radioactivo" que "se usa para la  construcción de armamento nuclear".

Romero aclaró, luego de varias horas, que "presumimos la existencia de  uranio en estos materiales" y que una información certera se conocerá esta  semana, luego de que el mineral sea estudiado por el estatal Servicio Geológico  de Bolivia y el independiente Instituto de Medicina Nuclear.

El anuncio de Pérez de que se trataba de mineral radioactivo alarmó a los  vecinos del exclusivo barrio de San Jorge, en el centro de La Paz.

"No puede ser que haya eso aquí, el uranio es peligroso", dijo una ama de  casa, mientras se desarrollaba el vasto operativo policial montado para remover  el material.

Varios canales de televisión mostraron a los policías y personal técnico  del Ministerio de Minería manipular las bolsas de mineral con guantes de látex  y ropa común.

La oficina de prensa del Ministerio de Gobierno exhibió fotografías del  mineral en forma roca, envuelto en bolsas plásticas.

Tampoco los vecinos fueron sometidos a controles médicos, pese a que en un  primer momento el gobierno habló de mineral "radioactivo".

Romero, que valuó el mineral hallado en 50 millones de dólares, dijo que el  mismo fue retirado a las afueras de la ciudad, donde será sometido a análisis  por parte del estatal Servicio Geológico de Bolivia y del independiente  Instituto de Medicina Nuclear, las únicas entidades capacitadas en este país  para establecer qué exactamente contiene el material.

INVESTIGACIÓN DEL HALLAZGO

El ministro del Interior indicó que el hallazgo se produjo tras una  investigación policial que comenzó tiempo atrás y que se tendrá un informe  final en el curso de esta semana.

Asimismo, dijo que "hay cuatro personas aprehendidas, tras el operativo de  la Policía boliviana, los que fueron dispuestos a manos del fiscal" que  iniciará la investigación.

El presidente de la estatal Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Héctor  Córdova, dijo a la radio privada Erbol que el hallazgo "es preocupante y llama  la atención".

Agregó que Bolivia no posee la tecnología para procesar uranio, a pesar de  que en el país hay un yacimiento del mineral en el departamento andino de  Potosí, al suroeste del país.

La prensa local especuló el año pasado que los gobiernos de Bolivia e Irán  habrían alcanzado un acuerdo para explotar uranio, aunque La Paz lo negó  tajantemente.