Luego de que el alcalde de Til Til, Nelson Orellana, decretara la clausura de 31 instalaciones del relleno sanitario KDM, el gobierno reaccionó haciendo un llamado a que prime la cordura y se mantenga el diálogo.
"El cierre del relleno sanitario está en pleno proceso. Sabemos de qué hay distintas medidas que está tomando el señor alcalde, esperemos que prime la cordura, dado que sabemos que eso significa un impacto ambiental bastante serio. Esperamos que el diálogo en este caso sea el método con el cual podamos superar estas diferencias y ojalá logremos una buena solución", dijo la ministra de Salud, Carmen Castillo.
En ese sentido, reiteró que hay una decisión tomada y una empresa que se va a instalar y que "cumple con todas las exigencias sanitarias desde el punto de vista del Ministerio de Salud. Todos los Ministerios tuvimos a la vista los distintos análisis que se efectuaron y en ese contexto nosotros decimos que vamos a ser exigentes con todas las fiscalizaciones que corresponden".
Así fue clara en sostener que por el momento no se han observado efectos negativos para la población de Til Til. "Por las razones ambientales, de atención de riesgo para las personas, al día de hoy no están dadas las condiciones para decretar alerta sanitaria", indicó.
En el caso de que el cierre se concretara, la secretaria de Estado aseguró que tienen las estrategias a la vista para poder hacerle frente.
En cuanto al informe emitido por el Colegio Médico, Castillo comentó que este incluye hipótesis de daños, las que por el momento no se han observado en los vecinos de la comuna.