Seis altos cargos militares colombianos  acudirán el martes a La Habana a negociar un "cese al fuego definitivo" con la  guerrilla de las FARC, anunció este lunes el presidente de Colombia, Juan  Manuel Santos, en su segundo día de visita a España.

"Mañana viajan cinco generales y un almirante que son miembros de la  subcomisión que se estableció para discutir el cese el fuego definitivo",  aseguró el mandatario durante un Foro por la Paz en Colombia organizado en  Madrid.

El presidente colombiano, que el domingo inició una visita de Estado a  España de tres días, no precisó la identidad de dichos militares.

De los cinco puntos establecidos al inicio de las negociaciones con las  FARC en Cuba a finales de 2012, las partes alcanzaron acuerdos en cuestiones de  desarrollo agrícola, de participación política de los guerrilleros y en acabar  con el narcotráfico.

Quedan sin embargo abiertos los dos puntos más delicados: justicia y  desarme.

"Lo que hemos acordado es que se va a discutir en forma simultánea el tema  de las víctimas, el tema de la justicia transicional, que es el meollo del  problema, y el tema del quinto punto que es el fin del conflicto propiamente  dicho, lo que se denomina DDR: desarme, desmovilización y reintegración" de los  guerrilleros en la vida civil, explicó Santos.

"El cese el fuego definitivo tiene que negociarse bajo unas reglas muy  claras, es un tema complejo, la geografía colombiana y los antecedentes en  Colombia no han sido los mejores en este tipo de discusiones", agregó.

Por ese motivo "hemos decidido que sean los propios militares en ejercicio  activo" quienes negocien ese punto en La Habana, aseguró Santos, asegurando  haber mantenido a los militares informados de todo el proceso de paz "inclusive  en la fase secreta".

"Anteriormente se había creído que por definición las fuerzas armadas se  van a oponer a cualquier proceso de paz y eso fue un error", aseguró.

"¿Quién mejor que los propios combatientes, los militares, para que estén  señalando el camino, para ver cuál es la mejor forma para negociar un cese el  fuegoâ", insistió.

Las FARC ya habían anunciado un cese de hostilidades unilateral en Navidad,  que fue respetado, y se trata ahora de alcanzar un alto el fuego bilateral que  ponga fin definitivamente a más de medio siglo de un conflicto que dejó 220.000  muertos y 5,3 millones de desplazados.