El Gobierno estadounidense reiteró hoy que quiere minimizar su presencia en los fabricantes de automóviles General Motors (GM) y Chrysler, pero aclaró que no venderá la totalidad de su participación en el 2010.
Ron Bloom, responsable del Grupo Presidencial del Automóvil (GPA) que supervisa las operaciones de GM y Chrysler, dijo hoy que aunque el Gobierno quiere vender sus acciones lo antes posible, tampoco quiere desprenderse de toda su participación en los fabricantes.
"No esperamos vender la totalidad de la participación", declaró hoy Bloom durante una vista del Panel de Supervisión del Congreso celebrada en Detroit.
Bloom tampoco quiso establecer un calendario de cuándo el Gobierno estadounidense podría vender su participación en GM.
"La mejor forma de salir lo antes posible es no comprometerse a una agenda definida", declaró.
El Departamento del Tesoro posee en la actualidad el 60,8 por ciento de General Motors (GM) y el 8 por ciento de Chrysler, tras prestar a las dos empresas unos 70.000 millones de dólares para su reestructuración y salida de la quiebra.
GM ha indicado que quiere emitir una oferta pública de acciones en el 2010, momento en el que el Gobierno estadounidense se podría desprender de gran parte de su participación en el fabricante.
Bloom destacó que la inversión del Gobierno estadounidenses en GM y Chrysler tendrá éxito "si los contribuyentes recuperan su dinero".
El asesor de la Casa Blanca explicó que los consejos de administración de GM y Chrysler serán independientes y funcionarán sin intromisión gubernamental porque, de lo contrario, los dos fabricantes tendrán dificultades para devolver el dinero prestado.
El tesorero de Chrysler, Jan Bertsch, confirmó durante la vista las palabras de Bloom.
"El día a día es responsabilidad de nuestra empresa", aseveró.
Bertsch dijo que Chrysler (que tras su salida de la quiebra el pasado 10 de junio está bajo control de la italiana Fiat) devolverá el dinero público en tres pagos a efectuar en el 2011, 2016 y 2017.
Por su parte, el tesorero de GM, Walter Borst, aseguró que la compañía pagará los préstamos gubernamentales para el 2015.
Precisamente esta semana se reunirá por primera vez el nuevo consejo de administración de Chrysler en la localidad de Auburn Hills, la sede del fabricante situada en las cercanías de Detroit.
El consejo de administración de Fiat está compuesto por cuatro directores nombrados por Washington, tres por Fiat, uno por el Gobierno canadiense y uno por el sindicato United Auto Workers (UAW).