Las autoridades iraquíes impusieron hoy el toque de queda en Bagdad y sus alrededores, después de que cientos de manifestantes irrumpieran en la fortificada Zona Verde de la capital y entraran en la sede del Gobierno.
La Comandancia de las Operaciones de Seguridad de Bagdad informó en un comunicado de que se mantendrá esta medida excepcional de forma indefinida hasta que se controlen las protestas.
El toque de queda nocturno en Bagdad, en vigor durante más de una década debido a la situación de inseguridad en la capital, fue levantado en febrero de 2015.