El gobierno de facto de Honduras denunció hoy que Venezuela envió aviones militares a Centroamérica para "intimidar o invadir" a este país y aseguró que "agentes extranjeros" mantienen un "círculo de seguridad" dentro de la embajada de Brasil, donde está el depuesto Presidente Manuel Zelaya.

"Preocupa al gobierno de la República la amenaza que se cierne sobre Honduras por parte del Gobierno de Venezuela, el que se ha extralimitado en su intrusión abierta y descarada", señaló la cancillería del Ejecutivo de Roberto Micheletti en un comunicado.

El texto acusa a Venezuela de enviar "aviones militares a la región centroamericana, con el propósito avieso de intimidar o invadir Honduras", sin concretar a qué lugares llegaron dichas aeronaves.

Desde que Zelaya fue derrocado, el pasado 28 de junio, el gobierno de facto ha acusado reiteradamente a Venezuela de injerencia y de preparar supuestos planes de invasión y de infiltración en Honduras.

Zelaya, aliado del Presidente venezolano, Hugo Chávez, permanece desde el lunes en la embajada brasileña en Tegucigalpa tras haber ingresado por sorpresa al país, 86 días después de que los militares lo derrocaran y el Parlamento designara en su lugar a Micheletti.

La cancillería dijo que "el evidente apoyo logístico y financiero brindado por parte de algunos gobiernos de América del Sur y de América Central en la materialización de ese ingreso clandestino constituye una violación de los principios de igualdad soberana de los Estados y de la no intromisión en los asuntos internos".

También denunció "la injerencia" del gobierno brasileño, que se ha puesto "en relieve", dijo, "con el ingreso del señor Zelaya a los locales que la nación sudamericana tiene todavía en Tegucigalpa".

El Ejecutivo interino hondureño acusó además a Brasil de "permitir" que su embajada "se convierta en un centro de subversión mediática, desde donde el huésped irregular (Zelaya) y su cercano entorno político continúan formulando llamamientos a la insurrección y a la toma del poder por la fuerza".

La cancillería igualmente aseguró que "la tolerancia ha llegado a extremos de permitir la operación, al interior de esos locales, de un círculo de seguridad compuesto por agentes extranjeros", de los que no precisó la nacionalidad.

Esto, añadió, "constituye un agravante y violación a las disposiciones nacionales e internacionales sobre la materia".

Reiteró que ha pedido "al gobierno de Brasil el cese inmediato de su intervención y, a menos que proponga otra medida, la entrega del señor Zelaya a las autoridades competentes de Honduras" para ser juzgado, pues es objeto de varias órdenes de captura por delitos políticos y comunes.