El gobierno de  unidad palestino se reunió este jueves en Gaza por primera vez desde su  formación en junio, tras años de hostilidades entre el movimiento islamista Hamas, al frente del enclave, y la Autoridad Palestina, constató la AFP.

Este consejo de ministros intentará transmitir el mensaje de que se usarán correctamente los fondos destinados a reconstruir la franja de Gaza tras la guerra de mediados de año con Israel, antes de la conferencia de donantes  que se celebrará el domingo en El Cairo.

"Lo que hemos visto es espantoso y doloroso y nos muestra claramente que  reconstruir es la primera de nuestras prioridades", dijo el primer ministro Rami Hamdalá, tras constatar los destrozos causados por los bombardeos  israelíes de julio y agosto.

"Dejamos atrás los años de divisiones, y la principal prioridad de este  gobierno es garantizar a los habitantes de Gaza una vuelta a la normalidad y la unidad con Cisjordania", afirmó.

Los potenciales donantes de la Conferencia de El Cairo son reacios a implicarse de nuevo en la reconstrucción de un territorio que sale de su tercera guerra en seis años. 

El consejo de ministros busca enviar a la conferencia de donantes un mensaje claro de que el dinero destinado a reconstruir la franja de Gaza será  bien utilizado por una autoridad compuesta de personalidades independientes, y  no leales a uno u otro bando.

El primer ministro, saludado por responsables del Hamas a su llegada por el  cruce de Erez entre Israel y la Franja de Gaza, estuvo bajo máxima protección  durante su visita a las ruinas.

En una conferencia de prensa conjunta, el ex primer ministro de Hamas en Gaza, Ismaïl Haniyeh, se congratuló por "el fin de las divisiones que vivimos  durante años y que afectaron a la nación y a nuestra política".

Subrayó la necesidad de "trabajar juntos para que este gobierno tenga éxito  en su misión".

LA AUTORIDAD PALESTINA ANTES QUE HAMAS

La última guerra en el exiguo enclave  superpoblado situado entre Israel,  Egipto y el Mediterráneo, causó más de 2.100 muertos de lado palestino y 73 de  lado israelí.

Destruyó o dañó decenas de miles de edificios e infraestructuras y decenas  de empresas.

Hundió aún más una economía de por si catastrófica, donde el desemplo  afectaba al 45% de la población activa antes de la guerra, y a un 63% de  jóvenes, según el Fondo Monetario Internacional.

Reconstruir Gaza costaría varios miles de millones de dólares y tardaría  varios años, según expertos. 

Para llevar a cabo tal empresa, una gran parte de la comunidad  internacional apuesta por un regreso a la franja de Gaza de la Autoridad  Palestina, que domina el Fatah de Mahmoud Abbas. 

La comunidad internacional rechaza tratar con la organización islamista  radical Hamas, relacionada con los Hermanos musulmanes y considerada como  terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea o Israel.  

La Autoridad palestina cedió ante Hamas en la franja de Gaza en 2007 cuando  ese movimiento tomó el poder por la fuerza a riesgo de provocar una guerra  civil con el Fatah.

Después, la Autoridad Palestina tuvo que contentarse con administrar los  territorio autónomos de Cisjordania, separados físicamente de la franja de Gaza  por territorio israelí.

UN GOBIERNO DE TECNÓCRATAS

La reconciliación entre los dos grupos fue lograda el 23 de abril por un  acuerdo firmado por el Hamas y la Organización de Liberación Palestina (OLP),  dominada por el Fatah. El acuerdo instauraba un gobierno de transición  constituido por tecnócratas aprobados por ambas organizaciones.

Ese gobierno de "consenso nacional" juró el 2 de junio y está compuesto por  17 ministros, entre ellos cinco de Gaza.

Nunca hasta este jueves el consejo de ministros se había reunido en Gaza.