El lunes pasado en la reunión de coordinación en La Moneda, la ministra de la Presidencia, Ximena Rincón, pidió a los jefes de bancada del oficialismo poner en tabla la reforma constitucional para regular el voto de los chilenos en el exterior.
En las últimas semanas Rincón, junto al titular del Interior, Rodrigo Peñailillo, habían sostenido varias conversaciones con parlamentarios de la Alianza y de la Nueva Mayoría para lograr el respaldo a la iniciativa, una antigua aspiración de gobiernos pasados, que será votada hoy por la Cámara.
La reforma, sin embargo, requiere del apoyo de 72 diputados para ser aprobada. Pero en el mejor escenario, la Nueva Mayoría sólo tendría una base de 66 legisladores, ya que el diputado DC, Roberto León está de viaje oficial en el extranjero. Por tal razón el Ejecutivo, además de redoblar los esfuerzos en materia de disciplina entre sus parlamentarios, está obligado a buscar votos entre independientes y de la Alianza.
"Estoy seguro que vamos a tener la disciplina necesaria", dijo el jefe de bancada DC, Matías Walker. "Vamos a aprobar la reforma tal cual", dijo el IC, Sergio Aguiló, mientras el PC, Guillermo Teillier dijo que a pesar de tener reparos "queremos asegurarnos que la ley salga ahora".
Si bien entre los diputados existe apoyo mayoritario a regular el voto de los chilenos en el exterior, el problema es que hay cuatro fórmulas en juego (ver recuadros). Por tal motivo existe la posibilidad de que ante la dispersión de votos la reforma sea rechazada.
FORMULA DE BACHELET
Además de poner suma urgencia al proyecto, la Presidenta Michelle Bachelet presentó una indicación (una enmienda) al texto original surgido de un acuerdo de senadores de la Alianza y la Nueva Mayoría.
La fórmula propuesta por la actual administración fija el voto en el exterior para elecciones presidenciales, plebiscitos y primarias presidenciales. No obstante, no precisa el procedimiento para sufragar en el extranjero. La idea del gobierno es que eso sea parte de una futura ley orgánica.
GESTIONES
Hasta ahora las gestiones de Rincón para obtener apoyos a la propuesta han dado algunos resultados.
A favor se ha manifestado la diputada independiente, Alejandra Sepúlveda, mientras que el diputado de Amplitud, Pedro Browne ya aseguró el apoyo de su bancada. "Lo hemos conversado con el gobierno. Es fundamental que en el exterior se pueda votar", dijo Browne.
Pero entre los Amplitud hay otra baja: la diputada Karla Rubilar, quien apoya la iniciativa, pidió permiso constitucional para viajar fuera del país.
En tanto, en el resto de los diputados independientes Giorgio Jackson, Gabriel Boric, Vlado Mirosevic mantienen dudas, por lo que no se descarta que ellos se abstengan. La razón es que no están de acuerdo con que la Constitución limite la participación en el exterior a comicios de índole presidencial. Jackson y Mirosevic son partidarios de sumar las parlamentarias. "Lamentablemente se mantiene la limitación. No comparto que esto quede amarrado", dijo Jackson.
Así, entre suma y resta, el gobierno aún no tendría los apoyos suficientes para aprobar la reforma.
En este escenario el voto decisivo será el de RN. Pero en esta colectividad prefieren la fórmula original propuesta por los senadores, que regulaba en la Constitución que los chilenos en el exterior debían inscribirse antes de cada elección. "Vamos a votar a favor. Pero prefiero el proyecto cómo lo dejó acordado el Presidente Piñera", dijo el jefe de diputados RN, Nicolás Monckeberg. Dada esta exigencia, hasta ayer seguían abiertas las conversaciones para buscar un acuerdo.
En la UDI, en tanto, prefieren un texto distinto y plantean que el voto debe ser ejercido por quienes tienen un vínculo con Chile. "Al dejar fuera la exigencia de un vínculo, hacemos un llamado a votar en contra", dijo el UDI, Arturo Squella.