El Gobierno español aprobó hoy un acuerdo para reformar las pensiones, negociado previamente con los sindicatos y la patronal, que considera "flexible", que ayudará en la recuperación de la economía y del empleo y transmitirá confianza dentro y fuera del país. Así lo expresó el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que aprobó la reforma.

El acuerdo alcanzado es parcial pero "sustantivo", y forma parte de un futuro pacto global económico y social, dijo Rubalcaba, quien añadió que el objetivo del acuerdo en pensiones es fortalecer este sistema público y garantizar que los ciudadanos que hoy tienen entre 40 y 45 años cobrarán con certeza sus pensiones.

Ha sido un trabajo "especialmente muy complejo" que ha tenido en cuenta el "equilibrio financiero, asegurando los ingresos y los gastos", dijo el vicepresidente primero y portavoz del Gobierno.

En virtud de esta reforma, los trabajadores podrán jubilarse a los 65 años y cobrar el total de la pensión tras cotizar 38,5 años, frente a los 35 actuales.

El 'pacto social' que las partes negociaron intensamente durante las últimas semanas incluye la reforma de las pensiones en la que se retrasa la edad de jubilación a los 67 años, dos más que hasta ahora, que deberán ir acompañados de una cotización de 37 años para poder cobrar el 100% de la pensión.

También se mantiene la jubilación anticipada, pero se endurece su acceso, ya que será a los 63 años y no a los 61 como ahora. Además, por cada año que se adelante la salida del mercado laboral se aplicará un coeficiente reductor, que actualmente es del 8% por año.

Respecto al cómputo de la vida laboral -los años que se tienen en cuenta para calcular la cuantía de la pensión- se pasa de los últimos 15 a 25, mientras que se mantienen en 15 los que se exigen para tener derecho a la pensión contributiva.

El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, dijo que con la reforma de pensiones los trabajadores tendrán el derecho de jubilarse a los 63 años sin que tengan que ser despedidos y explicó también que la jubilación anticipada irá acompañada de coeficientes reductores que recortarán la prestación por cada año adelantado.

El texto aprobado recoge que por cada año que se adelante la jubilación se recortará la pensión un 7,5% y que el total que se podrá acumular será del 42%. Los sindicatos mayoritarios Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO) dijeron hoy que consideran "indispensable" la "corresponsabilidad" del opositor Partido Popular (PP) en el acuerdo.