Después de casi 10 años, el salario mínimo dejará de reajustarse en julio. Tras el anuncio realizado este domingo por el Presidente Piñera -quien adelantó que a contar de este año el ingreso básico superará los $ 200 mil mensuales-, la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, precisó ayer que el Ejecutivo espera que la nueva ley entre en vigencia en abril. "Como a nuestra economía le está yendo bien y no ha llegado el desempleo que temíamos por la crisis internacional, hemos pensado adelantar el reajuste, para que la gente no tenga que esperar a julio, sino que pueda recibirlo a partir de abril", dijo la secretaria de Estado.

Si bien el gobierno ha enfatizado que aún no existe un guarismo definitivo, la medida ya suscita críticas entre los expertos.

"En la forma en que se hizo el anuncio, parece más político que técnico (...) va a generar bastante confusión, porque se aleja de la recomendación de la comisión técnica; no hay una política clara atrás", afirmó la economista de Libertad y Desarrollo Cecilia Cifuentes. Desde su análisis, el salario mínimo -que la ley actual fija en $ 193 mil mensuales- no debiera crecer sobre el 5%. El año pasado el Congreso aprobó un incremento de 6%. Y aunque la nueva cifra no está definida aún, si llegara a $ 200 mil, el alza sería de 3,6% nominal.

Diferente es la mirada del economista de la Universidad de Chile y ex integrante de la ex comisión asesora de salario mínimo, Joseph Ramos. A su juicio, las condiciones económicas permiten pensar en un reajuste en torno al 8%. "El aumento sugerido por el Presidente no es nada especial. A medida que nos acercamos al pleno empleo, podemos privilegiar el salario. No es descabellado pensar en un rango de 5% a 10% de reajuste", afirmó el experto.

Para la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), el anuncio responde a un acuerdo político alcanzado en la discusión del año pasado entre el Ejecutivo y la Alianza. "El año pasado el ministro de Hacienda llegó a acuerdo con algunos parlamentarios, entre ellos Carlos Larraín, de que el salario mínimo iba a llegar a $ 200 este año. Eso debió haber partido el 1 de enero. Dudo de que el Parlamento vaya a aprobar un reajuste de $ 7 mil para los próximos 16 meses. Esperamos que el reajuste sea discutido como corresponde en junio, o que la ley que enviarán esta semana estipule un salario mínimo mayor. Nuestra expectativa es llegar a $ 250 mil este año. Eso está definido. Vamos a insistir", criticó Arturo Martínez, secretario general de la CUT.

En la vereda contraria, el consejero de la Sociedad de Fomento Fabril y asesor de la Conapyme, Alfonso Swett, sostuvo que el salario mínimo no puede superar los $ 200 mil. "Quienes terminan pagando el salario mínimo son las pymes, no el gobierno. Y no hay políticas que hayan fortalecido a las pymes en el último tiempo. Entonces, no puedes exigirles más, porque han ido perdiendo competitividad en el tiempo", argumentó. Por eso, dijo que un nivel óptimo serían $ 197 mil mensual.

Desde el Ministerio de Hacienda señalaron que hoy se reunirán con algunos expertos para discutir el guarismo. En la cartera dicen que es viable la propuesta presidencial, debido a que la productividad laboral ha subido en el último tiempo.