Los sospechosos de terrorismo detenidos en la prisión de Guantánamo que sean llevados a Estados Unidos para procesarlos no se quedarán en el país, prometió el gobierno del Presidente Barack Obama.
Los detenidos que sean enjuiciados en Estados Unidos recibirán un trato de tipo inmigratorio como si estuvieran en la frontera e intentaran ingresar, pero no conseguirán entrar, afirmaron el secretario de Justicia Eric Holder y la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano.
Los funcionarios hicieron esa afirmación en una carta fechada el 11 diciembre y enviada a senadores republicanos de la Comisión de Justicia.
Pero los senadores republicanos respondieron que el gobierno no puede hacer semejantes promesas porque podrían intervenir las cortes estadounidenses.
El gobierno ha anunciado que cinco sospechosos todavía recluidos en la prisión militar estadounidense en Cuba serán procesados en una corte federal de Nueva York, y otros más posiblemente sean enjuiciados en Estados Unidos.
El gobierno decidió también adquirir una prisión en el estado de Illinois para internar a algunos de los detenidos en Guantánamo. Los tribunales militares para esos presos serán instalados en esa cárcel, donde podrían quedar confinados algunos de los reos de Guantánamo que el presidente considere deben ser recluidos indefinidamente y que no pueden ser procesados, de acuerdo con funcionarios del gobierno.
Una vez que un detenido sea llevado a Estados Unidos para enjuiciarlo, podría ser procesado, condenado y purgar la sentencia de prisión, o ser exonerado.
En caso de que un reo no pueda ser repatriado porque podría ser torturado en su país de origen, Estados Unidos le buscaría otro país, dijeron Holder y Napolitano.
Insatisfechos con esa respuesta, los senadores republicanos John Cornyn y Jon Kyl escribieron un boceto de carta para Obama, el cual podría ser enviada este miércoles.
"La Corte Suprema tiene todavía que resolver si es constitucional detener indefinidamente a supuestos terroristas que no son estadounidenses una vez que estén físicamente en Estados Unidos", dijeron los senadores.
El cierre de Guantánamo es una de las principales prioridades de Obama, quien firmó una orden ejecutiva en las primeras horas de haber asumido la presidencia para iniciar el proceso. El mandatario ha dicho que desea que los sospechosos de terrorismo sean transferidos a suelo estadounidense para que puedan ser enjuiciados por sus presuntos delitos.