El gobierno griego no planea nuevas medidas de austeridad como parte de los esfuerzos para sacar al país de la deuda, dijo el domingo el primer ministro.
George Papandreou afirmó que el gobierno anda bien encaminado para cumplir sus objetivos de reducir su déficit en casi 40% este año.
"No vamos a necesitar nuevas medidas", dijo Papandreu durante una conferencia de prensa un día después de pronunciar su discurso anual sobre la economía, durante una feria comercial en el norte de Grecia, y reiteró que Grecia no planeaba reestructurar su deuda; un paso que, dijo, sería "catastrófico" para la economía.
A cambio de 110.000 millones de euros en préstamos de rescate en tres años del Fondo Monetario Internacional y algunos países de la Unión Europea, Grecia ha implementado un estricto control fiscal en un esfuerzo por reducir el déficit presupuestario de 13,6% del PNB anual en el 2009 a 8,1% este año.
Los sindicatos, sin embargo, han expresado furia por medidas de austeridad que incluyen reducciones salariales y alzas de impuestos.
Al preguntársele si Grecia pudiera pedir una extensión del paquete de UE-FMI más allá del 2013, Papandreu dijo que el gobierno no planeaba hacerlo, y pudiera incluso dejar el programa antes si conseguía buen progreso.
El año 2013 "es verdaderamente el fin de este proceso", dijo Papandreu. "Mientras más rápido completemos las reformas en nuestro país ... más pronto podremos salir de estas restricciones. Eso pudiera suceder incluso antes del 2013, si nos va bien".
El principal reto para el gobierno es ahora es estimular los ingresos, que marchan rezagados, aunque el problema es contrarrestado por mejores resultados que lo esperado en el recorte de gastos.
De acuerdo con cifras dadas a conocer por el Ministerio de Finanzas la semana pasada, los ingresos netos subieron 3,3% en los primeros ocho meses del año, con un objetivo de 13,7% para el año. Sin embargo, los gastos cayeron 12% desde enero hasta agosto, con un objetivo anual de 5,8%.