En febrero de 1976, inició su carrera como diplomático el embajador Luis Palma Castillo, quien fue propuesto esta semana por Michelle Bachelet como nuevo embajador en Venezuela, en reemplazo de Rolando Drago, quien asumirá como director de ceremonial y protocolo.
La nota solicitando el beneplácito fue enviada el martes a Caracas a través de la embajada venezolana en Santiago, por lo que una respuesta es prevista para las próximas semanas.
Palma Castillo, quien es funcionario de carrera, se desempeñaba hasta la fecha como embajador en Jordania. En el oficialismo se le reconoce un perfil académico y una postura política reservada.
Su nombramiento se ajusta al diseño de la Cancillería de intentar mantener un lazo formal entre Santiago y Caracas, al margen de los altibajos políticos que ha sufrido la relación. El anterior nombramiento de Drago, también funcionario de carrera, apuntaba en el mismo sentido.
Licenciado en historia, Palma ha sido profesor de la Academia Diplomática, es experto en Medio Oriente y ha escrito libros sobre la Guerra Fría y el conflicto árabe-israelí.
Durante los primeros gobiernos de la Concertación ejerció como enlace de los ministerios de Relaciones Exteriores y de Defensa. En esa labor conoció a Bachelet.
