El Gobierno de Perú todavía no decidió si retomará las interceptaciones de aeronaves vinculadas con el narcotráfico, advirtió hoy el ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe, en un encuentro con la prensa extranjera acreditada en el país suramericano.
Pérez Guadalupe valoró que la Comisión de Defensa del Congreso de Perú aprobara el lunes un dictamen de proyecto de ley que plantea derribar las aeronaves que ingresen al espacio aéreo nacional sin autorización, pero señaló que "la decisión final no está tomada" por parte del Ejecutivo.
El ministro del Interior compareció junto a los viceministros de Gestión Institucional, Leoncio Delgado, y de Orden Interno, Mauro Medina, además de con el director de la Policía Nacional, Jorge Flores.
El ministro del Interior explicó que la medida fue tratada por el presidente de Perú, Ollanta Humala, y por el secretario asistente para Asuntos de Narcóticos y Aplicación de la Ley de Estados Unidos, William Brownfield, durante una reunión que ambos mantuvieron en Lima el 19 de febrero.
Pérez Guadalupe explicó que Estados Unidos planteó alternativas para garantizar la permanencia del statu quo que impide la interceptación de avionetas que ingresen al espacio aéreo de las zonas del narcotráfico, con propuestas que ofrecen "ayuda tecnológica e inclusive capacitación y helicópteros".
"Otra vertiente plantea la posibilidad, como la hay en otros países, de tener la libertad de realizar interdicciones porque estamos en nuestro territorio. Cada una de las posiciones tiene su parte de razón y con ellas habrá que sacar una decisión final como país", sentenció Pérez Guadalupe.
El titular de Interior recordó que Perú practicaba interdicciones de aeronaves del narcotráfico "hasta que (en el año 2001) sucedió un hecho lamentable" que provocó el derribo de una avioneta donde murieron la misionera estadounidense Veronica Bowers y su hija, a causa de "una confusión en temas de traducción".
Pérez Guadalupe señaló que desde entonces solo se permite la captura de las avionetas cuando se encuentran en tierra, "hasta poder tener la parte operativa mucho más experimentada para no volver a cometer un error de esa naturaleza".
"Si estamos preparados en ese contexto, lógicamente tendríamos que volver a asumir la interdicción" de aeronaves, consideró Guadalupe.
El ministro también comentó que la mayoría de las avionetas "tienen matrícula boliviana", pero "son compradas de segunda mano en Estados Unidos", y su ruta es llevarse la droga "hacia Bolivia o directamente a Brasil".
Jorge Flores explicó que la prioridad se centra actualmente en destruir las pistas de aterrizaje clandestinas, donde ya capturaron seis avionetas desde que comenzó el año 2015.
Pérez Guadalupe añadió que la estrategia de su sector para combatir el narcotráfico también contempla la erradicación de los cultivos ilegales de hoja de coca, que en 2014 superaron las 35.000 hectáreas, además de un plan integral para sustituirlas por plantaciones alternativas de café y cacao.
En materia de seguridad, el ministro, que asumió el cargo el 17 de febrero, apostó por impulsar el trabajo de inteligencia para combatir los delitos relacionados con el sicariato, la extorsión y los hurtos al paso, al afirmar que "causan el 90 por ciento de la inseguridad ciudadana".