Con cifras concretas obtenidas de los registros de la PDI y Carabineros, el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, salió a refutar la afirmación del ex Presidente Sebastián Piñera, quien señaló el martes en La Tercera que "muchas de las bandas de delincuentes en Chile son de extranjeros". Aleuy remarcó que la cifra solo corresponde a un 1,55% de los casos y añadió que "uno no puede construir políticas públicas en un mundo actual cuando lo que tiene es una mirada completamente xenofóbica y racista. Clasista, además".
El subsecretario llamó a tener cuidado con instalar "certezas discursivas que son extremadamente autoritarias", y también realizó un anuncio. Dijo que durante este gobierno se ingresará un proyecto de ley sobre migrantes que ha sido preparado por un equipo de trabajo mandatado por el Ejecutivo durante más de dos años -desde 2014-, y que concilia propuestas del propio Piñera y de la Presidenta Bachelet, insertándolas en la realidad actual de la inmigración en el país.
El proyecto de ley tiene 163 ar- tículos permanentes y 14 capítulos, fue debatido en ocho encuentros regionales y consideró la participación de nueve ministerios y 400 organizaciones del país. Aleuy sostuvo que la demora en ingresar la iniciativa responde precisamente a ese proceso, no obstante, el anuncio de La Moneda se produjo un día después de las afirmaciones de Piñera, y luego de que se conociera que Chile Vamos planea establecer el tema de los inmigrantes como una de sus banderas de batalla en la próxima campaña presidencial.
De hecho, pese a su clarificación, el propio subsecretario comentó que "uno no puede hacer políticas públicas en un país en temas delicados como este, pensando sólo en temas electorales, hay que pensar en el país y no sólo en las personas que pueden votar por ti".
El borrador actualizado del proyecto dista del original principalmente en la forma de abordar el tema, pues el primero enfocaba el tema como un servicio, y el actual se centra en un Departamento de Extranjería.
El texto aún debe ser visado por el Ministerio de Relaciones Exteriores, no obstante, según Aleuy, "la ley va a estar presentada en este gobierno" y dependerá del Congreso que pueda ser promulgada antes de que termine la administración Bachelet. "No sé si ellos van a hacer una discusión extremadamente acelerada de esto", dijo.
En todo caso, uno de los temas que entrampan el proyecto es precisamente una discrepancia de Cancillería con el texto propuesto, limitando las atribuciones de los consulados a la recepción y verificación de documentos para visado, pero otorgándole la potestad de aprobar los permisos al Servicio Nacional de Migraciones.
Contraofensiva oficialista
La recepción a la iniciativa, en todo caso, parece estar bien aspectada, pues luego de la arremetida de la oposición, desde distintos sectores de la Nueva Mayoría comenzaron a plantear que la ley de migraciones debe ser uno de los temas prioritarios para los próximos 15 meses de gobierno.
"Como decisión del partido y de la bancada de diputados, este jueves (hoy) el PPD pondrá el tema como una de las prioridades y privilegiará el que se establezca la obligatoriedad al gobierno de ingresar a trámite una nueva ley de migrantes", anunció el presidente de ese partido, Gonzalo Navarrete, aludiendo a la reunión que la Nueva Mayoría tendrá con el comité político de La Moneda para analizar las prioridades legislativas. En la misma línea, su par del PR, Ernesto Velasco, planteó que "el gobierno debe poner urgencia al debate de la ley de migraciones".
El secretario general del PC, Lautaro Carmona, coincidió en que "las prioridades legislativas no sólo tienen que estar vinculadas a las mociones de origen parlamentario, sino a la pauta que en términos públicos se pone por la sociedad civil. No se puede soslayar que la inmigración es un tema que está en el tapete, es un dato de realidad".
Aunque evitó referirse a una prioridad legislativa, el vicepresidente de la DC, Matías Walker, señaló que "el gobierno tiene que enviar el proyecto de ley de inmigración que se comprometió a mandar hace mucho tiempo, que establezca un estatuto de derechos y obligaciones para los inmigrantes. Creemos que los inmigrantes son un gran aporte al desarrollo del país y, por tanto, un estatuto de derechos y obligaciones para los extranjeros y migrantes puede ayudar a entregarles prestaciones de seguridad social, de salud y educación, pero no bajo el sesgo discriminador que planteó Chile Vamos de vincular delincuencia con aumento de inmigrantes, porque es una falacia".
El tema continuó este miércoles siendo una de las principales materias de debate. "Lo que no me gustaría es que esto se convierta en un tema donde no estemos a la altura de Chile en estas materias y que haya, efectivamente, elementos casi racistas. Como alguien me decía: ¿Habría la misma reacción si los migrantes fueran españoles, italianos o alemanes?", comentó por la tarde el ex Presidente Ricardo Lagos. En la misma línea, el ex agente de Chile ante La Haya, José Miguel Insulza, calificó como un "error" asociar delincuencia e inmigración.