Tanto representantes del gobierno sirio como de las fuerzas rebeldes, se atribuyeron avances de esta mañana en Salahedine, uno de los bastiones opositores ubicado en la norteña ciudad de Alepo.
Así, el gobierno sirio anunció haber "purgado" el distrito de Salahedine de los opositorios, e infligió "grandes derrotas" a los rebeldes. Por su parte, los activistas de oposición rechazan estas palabras.
El director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdul-Rahman, explicó que "estaban solamente en una parte de Salahedine, no en el centro".
Por su parte, activistas en Alepo confirmaron que los combates continúan y que no había soldados del gobierno en el interior de la localidad. "Ellos tienen tanques en la vecina Hamdaniya, y allí están combatiendo, y ha habido bombardeos esporádicos en Salahedine", aseguró Mohammed Said, quien se encuentra basado en la ciudad.
Al mismo tiempo, el secretario de Defensa de Estados Unidos, comenzó una gira por el Medio Oriente, criticando al líder sirio Bashar al Asad, por utilizar artillería pesada contra los rebeldes.