El martes pasado, en la sede del Congreso en Valparaíso, la presidenta y abanderada de la Democracia Cristiana (DC), Carolina Goic, sostuvo un reservado encuentro.
A la cita, que se realizó en las oficinas del Senado, llegaron los diputados democratacristianos Sergio Espejo y Matías Walker -ambos también vicepresidentes de la colectividad-, además de Fuad Chahín, Marcelo Chávez y Jaime Pilowsky.
La reunión con Goic fue solicitada por los diputados a la senadora poco antes de su realización, pasadas las 20 horas.
Previamente, la bancada de diputados había cancelado una cena en que abordarían -entre otras materias- la campaña presidencial y parlamentaria del partido.
Así, el selecto grupo resolvió a última hora pedir una reunión privada a Goic, quien aceptó, pese a la premura de la invitación.
La presencia de la candidata fue calificada como un gesto por los parlamentarios. Y no fue el único guiño que marcó la velada.
Todos los diputados que llegaron ese día hasta el Senado compartían un rasgo común: son considerados al interior de la DC como dirigentes "cercanos" a la senadora por Magallanes.
Sin embargo, en las últimas semanas la tensión de la campaña presidencial había lesionado el vínculo con algunos de ellos o impulsado a otros a tomar distancia de la abanderada presidencial.
Mientras hace algunos días Espejo se desmarcó de Goic por los dichos de la senadora sobre Karol Cariola -a quien tildó como "chica comunista"-, su par Marcelo Chávez había cuestionado públicamente la salida -el 8 de junio- del entonces jefe de campaña de Goic, Pablo Badenier.
"Cuando una persona es maltratada y empieza a pagar costos por decisiones que él no adopta es mejor marcharse", sostuvo en su oportunidad el diputado por el Biobío.
A esto se suman las críticas de la bancada de diputados hacia la influencia de un grupo de asesores de Goic en la campaña que exteriorizó el diputado Chahín, quien afirmó que "mientras las decisiones parece que se adoptan más bien por groupies y grupos de amigos, es difícil que esto pueda rectificarse como esperamos".
Con esas tensas semanas de declaraciones a cuestas, la reunión del martes para algunos fue "simbólica".
"Se buscó recomponer" la relación, señalaron algunos diputados consultados por la cita.
De hecho, en la bancada de diputados valoran las "acciones" que ha ido tomando Goic luego de que se comprometiera a "rectificar" el rumbo de la campaña. Esto, tras cuestionamientos de las bancadas.
Así, se vio con buenos ojos que Goic nombrara al ex diputado y ex presidente de la colectividad, Juan Carlos Latorre, como uno de los pilates del comando.
Latorre no sólo se reunió con los diputados la semana pasada en el Congreso, sino que se comprometió a presentar un plan para potenciar la campaña y el rol de los legisladores en ésta.
El diseño sería presentado dentro de dos semanas por el ex parlamentario.
En el partido tampoco pasó desapercibido que, pese a su rol de abanderada -que la obligó a delegar las negociaciones del partido con la Nueva Mayoría en materias como acuerdos electora- les-, Goic se sumara esta semana a la reunión y la decisión del comité de senadores DC de condicionar la ley que despenaliza el aborto en tres causales -riesgo de vida de la madre, inviabilidad del feto y violación-, a la inclusión de una objeción de conciencia para el cuerpo médico. Para muchos en la DC, esta podría ser una "nueva etapa" en el curso de la campaña presidencial.