El gigante de internet Google inició este miércoles una expedición en la comunidad Inuit en el Ártico, en la tundra de Canadá, con el objetivo de perfeccionar sus mapas y dar a conocer esta comunidad a sus millones de usuarios en línea.
El Primer ministro canadiense Stephen Harper se unió a la iniciativa cuando el equipo de Street View de Google llegó a la zona de Cambridge Bay en el paso del Noroeste para iniciar uno de sus proyectos más remotos.
"El objetivo de este proyecto es compartir con una audiencia global en línea la belleza del Ártico de Canadá y la cultura de la población Inuit que vive ahí", afirmó el equipo de Google.
Google dedicó 11 meses a planear el proyecto de realizar un mapa con la ayuda de líderes políticos y las personas de mayor edad de la comunidad Inuit en la zona de Cambridge Bay, en el corazón del archipiélago ártico canadiense.
"La gente nos pregunta todo el tiempo cómo vivimos, cómo sobrevivimos", afirmó la anciana inuit Anna Nahagaloak en una entrevista con la Kitikmeot Heritage Society.
"Siempre están preguntando sobre todo", continuó. "Esto les ayudará a entender y aprender más sobre Nunavut", un territorio autónomo de Canadá, en el Nordeste del país.
Nunavut es el territorio más al norte de Canadá y oficialmente está separado desde 1999.
Nahogaloak recordó que tenía diez años cuando su familia viajó en un trineo arrastrado por perros desde Brownside River a Cambridge Bay en 1958, donde construyeron una cabaña y se convirtieron en parte de la comunidad.
Ella también recuerda los perros se morían de hambre en el trayecto porque la caza era escasa. Su padre era cazador y pescador.
"Pienso que es importante para la comunidad Inuit contribuir en los mapas", dijo Nahogaloak. "Esta tierra es de todo el mundo. Todos la compartimos". El software de Google maps apoya la lengua local, el inuit.
El triciclo de Street View equipado con herramientas para capturar imágenes de 360 grados tenía planeado caminar por la ciudad y por partes de la tundra canadiense cercana este jueves.
Los equipos de Street View han pedaleado, conducido y caminado a lo largo de ciudades y pueblos de todo el mundo capturando imágenes para completar sus mapas en línea, que permiten a los usuarios situarse en un lugar y ver cómo es el sitio sobre el que sienten curiosidad, en una iniciativa no siempre exenta de polémica.