Waymo, la filial de vehículos inteligentes desarrollada por Google, lanzó un nuevo programa llamado "Early Rider", el cual pondrá por primera vez a disposición del público general su tecnología de conducción autónoma.

El programa, que inició esta semana en el área metropolitana de Phoenix, Arizona, permitirá que al igual que en servicios como Uber o Cabify, los habitantes de la ciudad puedan pedir un vehículo que los lleve a donde ellos deseen sin costo alguno y cuantas veces quieran.

Los únicos requisitos son inscribirse en un sitio web, ser mayor de 18 años y tener paciencia, ya que el proceso de postulación no será automático, pero una vez aceptados, podrán tomar todos los viajes que quieran sin costo alguno. Dentro de la postulación, Waymo tomará en cuenta las razones por las que se postula, pero también las rutas que podrían tener, para así abarcar la mayor cantidad de población posible.

Si bien el costo para el usuario será gratuito, en realidad lo que están haciendo es ayudando a la compañía de Google a mejorar su sistema de vehículos autónomos que desde este año tomó el nombre de Waymo. La compañía ya los ha estado utilizando de manera interna por años, pero ahora quieren probar que efectivamente funcionen a una mayor escala y con un perfil de usuario que realmente se adapte a las necesidades de la gente, es decir, que el vehículo sirva tanto para llevar gente al trabajo como para dar un paseo, ir al cine o pasar toda una mañana realizando trámites.

Se trata del mayor programa de pruebas de conducción autónoma que se ha creado: serán 600 los vehículos que se pondrán a disposición del público -todas minivans de la compañía Chrysler- y el área del cobertura será dos veces mayor a la que tienen en San Francisco. Y desde la compañía aseguran que no habrá ningún riesgo: los autos tendrán conductores de emergencia en caso de que falle algo, y de los más de 4 millones de kilómetros recorridos por todos los autos robóticos, solo se han registrado 14 colisiones, ninguna de ellas con lesiones y en su mayoría, por culpa de choferes humanos.