Grabaciones revelan existencia de tumbas fenicias en mansión de Berlusconi
En una de las últimas conversaciones entre el primer ministro y su "acompañante", se menciona las tumbas que datan del 300 antes de Cristo.
El primer ministro, Silvio Berlusconi se encuentra enfrascado en una nueva polémica. A sus fiestas con prostitutas de lujo, ahora se suma la existencia de tumbas fenicias en su mansión sarda.
En una de las últimas grabaciones de las conversaciones entre Berlusconi y Patriza D'Addario, publicadas en el sitio del semanario L'Espresso, se deduce que el premier, presentó a su huésped la Villa Certosa de Cerdeña, dijo: "Aquí abajo descubrimos 30 tumbas fenicias del 300 antes de Cristo".
Es por eso que, el dirigente del Partido de los Comunistas Italianos, Pino Sgobio, advirtió hoy que el código de bienes culturales prevé que los descubrimientos arqueológicos deben ser presentados en un plazo de 24 horas, en referencia a las supuestas tumbas fenicias que se encontrarían en la mansión sarda de Silvio Berlusconi.
"El artículo 90 del código de los bienes culturales y del paisaje prevé que quien descubre por casualidad cosas inmuebles o muebles debe denunciarlas en el plazo de 24 horas a las autoridades", manifestó Sgobio.
"Pedimos a las autoridades competentes indagar para verificar si es cierta la existencia de las tumbas y si el premier respetó la ley", manifestó el dirigente.
Según la Asociación Nacional de Arqueólogos y Paolo Bernardini, máximo experto de tumbas fenicias en Cerdeña, el hallazgo, si es confirmado, puede representar un dato importantísimo para el estudio de la expansión fenicia en la isla.
En tanto, el Partido Demócrata, principal de la oposición, emplazó a Berlusconi a informar al Parlamento sobre lo sucedido.
"Es necesario saber si existen o no estas tumbas fenicias en la residencia del premier y, sobre todo, si fueron denunciadas o no a las autoridades competentes", advirtió el senador Andrea Marcucci.
El canciller, Franco Frattini, aseguró que la mujer que dio a conocer todos estos datos recibió dinero de la prensa a cambio de declarar contra el primer ministro.
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