La Asociación de Fiscales criticó la designación de persecutores con designación preferente a determinadas causas, pues aseguran que eso se traduce en una mayor sobrecarga de trabajo para los investigadores.
Al menos cinco casos de connotación pública son indagados por fiscales preferentes, y uno con dedicación exclusiva, y sólo la semana pasada se designó a tres de ellos.
Para el presidente del gremio, Claudio Uribe, la escasa cantidad de persecutores no da abasto como para este tipo de labores.
Uribe, manifestó a La Tercera que, "es trágico que haya casos gravísimos donde el Ministerio Público no es capaz de nombrar fiscales exclusivos, porque no tiene los medios de dedicarse exclusivamente a las investigaciones".
A cambio, el nombramiento de fiscales preferentes, implica que éstos no pueden dejar el resto de sus causas de lado, dijo Uribe, "pero le dedica más tiempo a un solo caso, y lo más probable es no tenga ni tiempo ni energía para atender las otras causas".
"Esto demuestra la urgencia de aprobar la Ley de Fortalecimiento del Ministerio Público, porque faltan fiscales, falta gente experta, hay colegas que están colapsados, y lo más probables es que tienen que sumar a su carga laboral grandes investigaciones y van a terminar renunciando", dijo el presidente de la Asociación.
Si bien, el Fiscal Nacional, Sabas Chahuán reconoció que los fiscales "tienen una sobrecarga de trabajo", explicó que la designación de fiscales preferentes para ciertas causas, como medida extraordinaria, no afecta la labor de los mismos.
"Se trata de redistribución de trabajo. Que esas causas estén preferentemente en un fiscal. Lamentablemente no significa aliviarle toda la pega, pero sí que se redestinen esas causas y algunas sean devueltas a otros fiscales, de manera tal que el fiscal sea preferente para estas causas, pero no va a quedar sin trabajo", dijo Chahuán a La Tercera.
La máxima autoridad del Ministerio Público indicó que, las causas asignadas "se distribuyen para otros fiscales, pero algún alivio de la carga de trabajo de sus otras causas hay que hacer. Evidentemente eso marca una sobrecarga en todo el país, pero tienen que ser fiscales que tengan experiencia".
Sabas Chahuán, descartó que la medida implique cerrar casos por la vía de salidas alternativas para disminuir la cantidad de casos por cada fiscal, "porque sería desvestir un santo para vestir otro".