Brasil, Rusia, China, India y Sudáfrica dieron luz verde a la creación del Banco de Desarrollo conjunto de Fomento y del Fondo de Reservas durante la VI Cumbre que los cinco países emergentes celebraron hoy en Fortaleza.
Los ministros de Hacienda de las cinco naciones firmaron el tratado constitutivo del Acuerdo de Reservas de Contingencia (CRA, por sus siglas en inglés) y del Nuevo Banco de Desarrollo, que tendrá sede en la ciudad china de Shanghai, según fue anunciado hoy la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
La primera autoridad del banco recaerá en Rusia, el director será brasileño y el presidente indio, mientras que la oficina regional estará situada en Sudáfrica.
El capital inicial autorizado será de 100.000 millones de dólares, mientras que el capital suscrito y desembolsado será de 50.000 millones de dólares, de los que cada socio aportará una quinta parte.
La entidad estará destinada a la financiación de proyectos de infraestructura de los países fundadores, pero también podrá ofrecer capital a otros países en vías de desarrollo como mecanismo financiero alternativo.
Los Brics formalizaron la creación del CRA, el cual podrá ser utilizado por los miembros del Brics frente a "contingencias financieras".
El fondo estará dotado con 100.000 millones de dólares, de los que China aportará 41.000 millones de dólares; Rusia, Brasil e India 18.000 millones cada uno y Sudáfrica los 5.000 millones restantes.
La creación de ambos organismos financieros supone un desafío al control de Occidente en las finanzas globales moldeadas hace siete décadas en Bretton Woods, la cita de 1944 en la que nacieron el FMI y el Banco Mundial (BM).
La firma de los tratados constitutivos supone el comienzo de un "nuevo ciclo" con la creación de los mayores instrumentos e instituciones financieras hasta ahora acordados por el BRICS de entre cerca de 30 áreas de cooperación en la que trabajan desde hace cinco años.