Grupo Carso SAB, la compañía holding controlada por el multimillonario Carlos Slim, planea escindir sus filiales de bienes raíces y minería para permitirles a los inversionistas considerar su valor separadamente.
Las escisiones requieren la aprobación de los accionistas y se cotizarían en la bolsa de México, dijo ayer en un comunicado la compañía con sede en la Ciudad de México. Carso adquirió activos inmobiliarios el año pasado de otra compañía controlada por Slim por US$22,6 millones.
"El objetivo es revelar el valor de todo el grupo", dijo Luis Miranda, analista de Banco Santander SA en Ciudad de México. "Dará más visibilidad a los resultados de ambas divisiones". Y califica a las acciones de Carso con "desempeño inferior al del mercado".
La filial de minería de Carso, que generó 6,8% de las ventas por 66.000 millones de pesos (US$5.100 millones) el año pasado, planea abrir más minas y adquirió una en junio después de aumentar la producción de oro en 2009 al subir el precio del metal. Los otros negocios de Carso incluyen cadenas minoristas y filiales que fabrican autopartes y cables para redes telefónicas.
"Es un buen momento para crear un gran grupo minero mexicano por el estado de los precios de los metales", dijo Arturo Elías, portavoz de Slim. "Esto puede suministrar un muy buen valor a los inversores".
El cronograma para las escisiones no se ha determinado aún, agregó Elías.
