"Quizá España tenga el sistema financiero más sólido de la comunidad internacional", decía el presidente español José Luis Rodríguez Zapatero, el 24 de septiembre de 2008, una semana después de la caída de Lehman Brothers en Estados Unidos. Pero esa realidad cambió, y la banca ibérica entró en una crisis de la que aún no puede salir. Justamente, uno de los emblemas de esa caída ha sido el Banco Popular de España, al mismo al que, según se conoció este viernes, Andrónico Luksic ingresó con el 3,014% de la propiedad, justo cuando las acciones retroceden 18,3% en lo que va de 2017.
A través de Aeris Invest, con domicilio en Luxemburgo y controlado por la fundación Vallum -que maneja las inversiones en Europa de la familia Luksic-, compraron títulos del Banco Popular de España por cerca de 90 millones de euros (unos US$ 99 millones) en una operación de adquisición de acciones que se inició en enero de este año y que concluyeron con el porcentaje informado este viernes, el 25 de abril pasado.
Esta, la primera incursión en el negocio financiero en Europa de los Luksic, es comandada por Davor Luksic, José Ignacio Bulnes, Michael Franken y Nicolás Barraza. La operación, cuentan conocedores, se financia con dividendos que entrega Antofagasta plc. Además, en Europa, Luksic también está en el negocio hotelero, turístico e inmobiliario, así como en la producción de cables.
El banco de referencia
Por años (fue fundado en 1926) el Banco Popular era el referente de la buena salud del sistema en España y gestionaba los recursos de los más adinerados del país ibérico. Su crecimiento fue tal, que incluso expandió sus operaciones a Estados Unidos.
En julio de 2007, en Florida, el Popular compró por 300 millones de euros (unos US$ 329 millones al cambio actual) el TotalBank. Justo, uno de los activos que ahora está en venta, en una subasta de inversiones prescindibles que deberían dejarle, según la prensa especializada de España, una caja de 100 millones de euros (US$ 109 millones) para rebajar su abultada carga financiera.
Durante 2016, el Popular perdió 3.611 millones de euros (US$ 3.700 millones) y la acción cayó 66,37% en la Bolsa de Madrid. En tanto, los resultados del primer trimestre, informados este viernes, dieron cuenta que entre enero y marzo de este año, el negocio bancario ganó 180 millones de euros (US$ 197 millones) 34% menos que igual periodo de 2016. La unidad inmobiliaria, con activos por 24.600 millones de euros (US$ 27 mil millones) perdió 317 millones de euros (US$ 348 millones), más que hace un año.
Ese, fue justamente el momento que los Luksic apostaron por entrar. En lo que va del año, la acción del Popular ha caído 18,3% cotizándose este viernes en 0,75 euros (US$ 0,82). Sin embargo, entre otros factores, la noticia del ingreso del banquero chileno a la propiedad hizo que el título saltara 8,85% el viernes, liderando las alzas en el Ibex español.
En todo caso, la relación del banco con Chile no es reciente. En la web del Banco Popular se informa que "para acompañar a nuestros clientes en sus inversiones en Chile, el Banco Popular estableció un acuerdo de colaboración con el tercer banco chileno, Banco Crédito Inversiones, BCI". De hecho, el BCI tiene una oficina en las instalaciones de Madrid, y el español tiene su oficina de representación en el piso 14 de El Golf 125.
Es más, en las negociaciones por vender el TotalBank en Florida, es justamente el BCI uno de los candidatos a quedarse con la operación.