Las fuerzas del líder libio Muammar Gaddafi pierden el control en parte del país. Grupos opositores, agrupados en los llamados comités populares, se tomaron desde la frontera con Egipto hasta Bengasi, la segunda ciudad en importancia después de Trípoli, zona donde mantiene influencia Gaddafi. También en Misurata, a apenas 200 kilómetros al este de Trípoli, la oposición domina la zona.
Según consigna el diario español El Mundo, "no se ve un solo militar, mejor dicho, un solo uniforme, ya que muchos soldados se han despojado de su vestimenta oficial y ayudan a controlar el territorio libio vestidos de civil y fuertemente armados".
Los habitantes libios de la "zona liberada" enarbolan banderas anteriores al régimen de Gaddafi y corean consignas a favor de una monarquía, ligándola a la ansiada libertad. En tanto en la ciudad de Tobruk, cientos de personas se manifestaban esta mañana a favor de la democracia y en contra del dictador.
"El único miedo que tenemos es que Gaddafi envíe más mercenarios para retomar el control", dijo Alá Faddala, miembro de uno de los comités populares que "gobiernan" Tobruk. "Pero incluso así, no nos rendiríamos", añadió.
Según el diario El Mundo, los comités populares están adoptando el esquema de organización y resistencia que se vivió en Egipto. Así como las concentraciones que se registraron en la plaza Tahrir en El Cairo. Los comités organizan el día a día, la seguridad en las calles, en las carreteras (fuertemente vigiladas por civiles armados), la limpieza y el reparto de comidas.