Guardiola y segunda temporada en el City: "Espero pasármelo tan bien como en la primera"

Josep Guardiola es sin duda uno de los entrenadores más exitosos de los últimos años. El catalán que dirigió a Alexis Sánchez en Barcelona lo ganó absolutamente todo con el cuadro culé y para muchos lo transformó en el mejor equipo de la historia, por títulos, pero sobre todo, por el juego mostrado. El dominio azulgrana durante los años en que Pep estuvo al mando fue casi total, a excepción de la temporada (2011-2012) donde tropezó en semifinales de Champions League ante Chelsea y perdió la Liga de España a manos del Real Madrid de José Mourinho, mismo entrenador que consiguió eliminarlo con Inter de Milán en semis de Champions en 2010. Salvo eso, los culés dominaron a su antojo todas las competiciones que jugaron y lo hacían arrasando con sus rivales. Logró 14 títulos como entrenador del Barça en apenas cuatro temporadas. Una gesta brillante.

Sin embargo, Pep decidió marcharse de Barcelona acusando el desgaste de dirigir a un equipo tan mediático y poderoso, que contaba en sus filas con figuras de la talla de Lionel Messi, Xavi Hernández, Andrés Iniesta y Carles Puyol, entre otros. El de Santpedor dijo sentirse vacío y con ganas de cambiar de aires, por lo que se marchó de Cataluña.

Luego de un tiempo de descanso, el ex centrocampista asumió como técnico del Bayern Múnich en 2013. Estuvo tres temporadas a cargo del cuadro bávaro, consiguiendo que su equipo asimilara la idea futbolística que Pep traía desde La Masía y logrando un claro dominio en títulos a nivel local. Sin embargo, tuvo una gran deuda a nivel internacional que le arrastró sus primeras críticas como entrenador, ya que no logró coronarse en la Champions League, el gran objetivo de los equipos grandes de Europa. De hecho, no logró ni siquiera alcanzar la final del torneo más importante de clubes, lo que fue considerado en Alemania como un fracaso. A pesar de esto, Guardiola logró campeonatos importantes en sus tres temporadas a cargo del conjunto bávaro, obteniendo el tricampeonato de la Bundesliga, el Mundial de Clubes de 2013, la Supercopa de Europa del mismo año ante el Chelsea de Mourinho y la Copa de Alemania de 2014 y 2016. Una producción menor considerando sus antecedentes en Barcelona, pero de igual manera un registro notable.

Hasta ahí, la carrera de Pep como entrenador se plagaba de éxitos y de campeonatos año tras año, hasta que asumió en 2016 la banca del Manchester City, en reemplazo del chileno Manuel Pellegrini. En su primera temporada pidió la contratación del capitán de La Roja, Claudio Bravo, lo que obligó al portero Joe Hart, uno de los emblemas del equipo, a marcharse , recalando en el Torino de Italia. Esto trajo las primeras críticas a Guardiola cuando recién empezaba. Y los cuestionamientos se acrecentaron una vez concluida la temporada, ya que, el City no consiguió levantar ninguna copa. Pep cerraba así su primer año sin títulos como entrenador.

A pesar de esto, el catalán aseguró en una entrevista con L´Esportiu haber sido feliz en su primera temporada en Inglaterra. Cuando le consultaron sobre los desafíos que se vienen para la temporada venidera, el ex jugador aseguró:

"Espero pasármelo tan bien como en la primera. Porque he disfrutado. Hay gente que dice que no ha ido bien, pero la excepción es lo que habíamos hecho hasta ahora. Siete años de entrenador profesional y seis ligas ganadas, y con respecto a la que se perdió, tendríamos mucho que debatir. Siempre en finales de Champions. Este año no hemos estado, pero es que el Barça tampoco ha llegado cada año a semifinales. El City es un gran equipo, ha estado cinco años seguidos en Champions, el único equipo inglés que lo ha conseguido, pero llegar hasta el Barça, el Real Madrid, el Bayern, la Juventus...es muy complicado. Necesitas tiempo, una década".

A propósito de la gestión que ha hecho en Inglaterra, el técnico se refirió a la reconstrucción del equipo: " Ahora, con Txiki, intentamos hacer los cambios necesarios para reforzar el equipo. Era el más veterano de la Premier. Un equipo que había logrado muchos éxitos, pero que se había hecho mayor. Lo rejuvenecimos algo con Gabriel Jesús, Gundogan, Sané y lo tenemos que seguir haciendo. He jugado con ocho o nueve jugadores de la liga de Pellegrini", afirmó.