Se veía venir. Luego del lanzamiento del nuevo iPhone 5S, sin duda lo más comentado tuvo que ver con el nuevo sistema de seguridad impuesto por Apple, el sensor de huellas digitales Touch ID, que es capaz de reconocer hasta cinco dedos de su propietario para desbloquear el dispositivo.

Según Apple, el sistema era lo bastante seguro como para que los usuarios no se preocuparan del robo y posterior hackeo de su dispositivo. Sin embargo, un grupo de informáticos del Chaos Computer Club demostró lo contrario, con una técnica digna de cualquier película de Hollywood.

El montaje consiste en una fotocopia de la huella dactilar del propietario, que debe ser obtenida en alta resolución (al menos 2400 dpi), para luego procesarla, invertirla e imprimirla (1.200 dpi de resolución) en una espesa lámina transparente. Posteriormente, al molde se le aplica una capa de látex y después del secado se humedece ligeramente, para entonces ubicarla sobre el sensor. Como se aprecia en el video, el método funciona, pero es lo suficientemente complejo como para que los usuarios no se preocupen.

Según los hackers, el sistema en sí es seguro, aunque básicamente utiliza el mismo principio de otros sensores de huellas. En comparación con detectores similares, el reconocedor de Apple emplea un sensor de mayor resolución, por lo que el único punto complejo consistió en hacer más fina la falsificación.

Sin embargo el sistema también ha probado ser fidedigno, no sólo con los dedos de las manos, ya que en YouTube es posible ver varios videos de usuarios con ditintas partes del cuerpo probando si el sistema se desbloquea o no, incluso con la pta de un gato.

FUENTE: Macrumors, Chaos Computer Club, Techcrunch