Fuertes niveles de elementos radiactivos tóxicos fueron detectados de nuevo en las aguas subterráneas acumuladas al pie de la central nuclear de Fukushima accidentada en marzo de 2011, según un comunicado publicado por el operador Tepco.

Según Tokyo Electric Power Co (Tepco), los análisis han permitido detectar  la presencia de niveles de tritio diez veces superiores al límite tolerado. 

"Según las muestras analizadas el 5 de julio (...) hemos detectado un nivel  récord de 600.000 becquereles por litro" de tritio, diez veces superiores a las recomendaciones gubernamentales, que son de 60.000 becquereles por litro, dijo  Tepco.

A finales de junio, Tecpo anunció que había medido un nivel de 3.000  becquereles por litro de elementos radiactivos que producen rayos beta, como el  estroncio 90, en el líquido extraído en una zona situada entre los reactores y  el mar. En ese momento, constató que los niveles de tritio eran ocho veces  superiores a lo autorizado.

Estas sustancias radiactivas escaparon de los reactores de la central de Fukushima Daiichi, fuertemente dañada por el sismo y el tsunami del 11 de marzo de 2011 en el noreste del archipiélago y contaminaron las aguas subterráneas  que desembocan en el mar con el consiguiente riesgo de afectar la vida acuática y los productos marinos consumidos por la población.

Sin embargo, un responsable de Tecpco aseguró el mes pasado que no se han constatado aumentos anormales de estas sustancias en el agua del mar. La  compañía estima que las bases de cemento y armaduras de acero contienen la mayor parte del agua subterránea.

Estas revelaciones son las últimas de una serie de incidentes en la central  de Fukushima, más de dos años después de la peor catástrofe nuclear que ha vivido el mundo en una generación.